Economía
Ver día anteriorDomingo 25 de enero de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Básicamente, nada está a salvo, incluso centrales nucleares y sistemas financieros

Advierten en el foro mundial de Davos sobre consecuencias catastróficas de ciberataques

Experto de la ONU pidió un marco jurídico internacional para perseguir a estos delincuentes

Foto
Un hombre rodeado por muñecos de nieve se toma una selfie durante una protesta contra el Foro Mundial Económico en Davos, SuizaFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Domingo 25 de enero de 2015, p. 25

Davos.

En el Foro de Davos se alertó de las consecuencias catastróficas de los ciberataques, los cuales podrían poner en peligro las centrales nucleares, redes de telecomunicaciones e incluso los sistemas financieros mundiales.

A lo que ustedes llaman Internet de las cosas, yo le llamo Internet de las amenazas, dijo Eugène Kaspersky, de la compañía de seguridad informática Kaspersky Lab, en referencia a la multiplicación de objetos conectados a la red. Para Kaspersky, un individuo tiene más posibilidades de ser víctima de un pirata informático si cuenta con un mayor número de dispositivos conectados a Internet como televisiones inteligentes, entre otros.

El peor de los peores escenarios posibles es un ataque contra una gran infraestructura, como una planta de energía. Sin energía, el resto del mundo no trabaja, advirtió este experto en seguridad en el foro en el que se reunieron hasta este sábado la élite política, financiera y empresarial del planeta.

El presidente de Estonia, Toomas Hendrik Ilves, dijo que los delincuentes podrían provocar el caos y afirmó que el deber de los gobiernos es facilitar a los ciudadanos herramientas de protección de datos.

Tras el ciberataque contra Sony el año pasado, la seguridad cibernética ha sido un tema candente en el Foro Económico Mundial de Davos. La conclusión: Básicamente, nada está a salvo, resumió Ilves.

Jean-Paul Laborde, responsable de la unidad antiterrorista de Naciones Unidas, subrayó el aumento de vínculos entre el crimen organizado y los grupos extremistas como el Estado Islámico (EI), que, a su juicio, se coordinan ahora para lanzar ciberataques contra las autoridades.

Ahora atacan incluso infraestructuras policiales, para bloquear la acción contra ellos fuera de sus territorios, dijo Laborde, quien pidió un marco jurídico internacional para llevar a estos criminales ante la justicia. No obstante, reconoció que es muy difícil precisar su ubicación y acordar una legislación común entre las naciones.

El presidente de Estonia indicó que la línea entre los ataques apoyados por un gobierno y las acciones criminales se ha vuelto cada vez más borrosa. Los gobiernos pagan a los criminales. Usted no sabe quién está haciendo qué, apuntó Ilves, quien puso como ejemplo la llegada de militares a la península de Crimea, antes de pasar de soberanía ucraniana a rusa. Los soldados no portaban ningún signo identificativo de su procedencia, si bien los países occidentales acusaban a Moscú de estar detrás.

Con la creciente presión sobre las compañías de Internet para bloquear páginas de reclutamiento de yihadistas, entre otras, Bradford Smith, un alto ejecutivo de Microsoft, devolvió la pelota a las autoridades públicas, al asegurar que esta decisión deben tomarla los parlamentos nacionales.

Asimismo, advirtió del peligro de poner las denominadas puertas traseras en los sistemas de mensajería, como solicitó recientemente el primer ministro británico, David Cameron, para poder controlar una eventual actividad criminal.