Autoridades de la Secretaría de Gobernación (SG) condicionan la instalación de una mesa de negociación para atender la agenda del Frente Indígena y Campesino de México (Ficam) al levantamiento del plantón instalado desde el lunes, dijo Francisco Jiménez Pablo, de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala Movimiento Nacional (CNPA-MN). No nos iremos hasta asegurar atención a cada caso, pues el año pasado denunciamos hostigamientos en contra de 40 personas de comunidades de Veracruz y Chiapas, el gobierno no actuó y 13 fueron asesinadas, expuso. Al menos 50 autobuses con letreros de algunas de las nueve agrupaciones que integran el Ficam permanecen estacionados sobre las laterales de la calle de Morelos entre Balderas y Reforma, y cientos de hombres, mujeres y niños –según los organizadores de la movilización son 2 mil– permanecen bajo toldos improvisados con hules, acostados sobre cartones, sentados en las banquetas de la calle de Bucareli; sus rostros muestran el cansancio tras cuatro días de permanecer en las calles, pero se niegan a regresar a sus lugares de origen, ya que, dicen, no han sido escuchados ni atendidos. Ayer se sumaron al plantón campesinos del estado de México, Morelos y Tlaxcala.