Opinión
Ver día anteriorJueves 12 de marzo de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dinero

Los nuevos magnates de la televisión

Gasta el gobierno tres veces más de lo que recibe

Un respiro al peso

Astillero

Raúl Cervantes, el próximo

Anunciada degradación

Cuatro ausentes

Adelante, Aristegui

Enrique Galván Ochoa
Julio Hernández López
México SA

El catarrito, una vez más

Dólar: reservas en prenda

Videgaray: mal de muchos

Ciudad Perdida

¿Candidatos probos?

Filtros electorales inocuos

Credibilidad en duda

Carlos Fernández-Vega
Miguel Ángel Velázquez
Navegaciones

Los tanques enterrados de Saddam

Andanzas

Mujeres en el arte

Pedro Miguel
Colombia Moya
Ley de aguas: privatización y explosividad
E

n conferencia de prensa, ayer, la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad, que agrupa a académicos e investigadores de los principales centros de enseñanza en el país, afirmó que la decisión de posponer la discusión de la Ley General de Aguas en la Cámara de Diputados no es suficiente, y que el dictamen –ya aprobado en las comisiones legislativas– debe ser desechado. A renglón seguido, los catedráticos señalaron que la aprobación del referido dictamen en sus términos actuales conlleva consecuencias negativas para la población, como la privatización del agua, la cual sería considerada principalmente un bien económico y no cultural y social; la ampliación de los márgenes para la contaminación industrial del líquido y la imposición de restricciones e incluso sanciones a los estudios académicos, la investigación científica y el monitoreo de cuerpos de agua.

El Correo Ilustrado

Acerca de la designación de ministro y la acción social

L

amentable, muy lamentable. La impresionante consecución del acto no tiene medida: la ausencia de los cuatro senadores de oposición, la papeleta rota, etcétera… De verdad, no hay necesidad de profundizar lo que nos espera con la imposición de Medina Mora; es otro acto más en contra de la nación. No habrá solución acorde al momento que vive el país mientras esta clase política siga en funciones.

Iguala, la fuerza moral
E

n los ya largos años que llevamos sin respiro viviendo en crisis –institucional, social, ética– no hay un acontecimiento que reúna en sí mismo, por lo que fue y lo que implica, por sus consecuencias estremecedoras, los atributos reales y simbólicos de la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa en Iguala. Pasarán los meses y los años, pero no se borrará ni el dolor de las víctimas ni el horror de la ciudadanía, que al reaccionar manifestándose airadamente también busca su identidad, esa voz propia en medio de un orden fincado en la articulación subordinada de ciertas tareas del Estado a la violencia delincuencial.

Feminismo vs. machismo
K

iko Vega, como se le conoce en su casa al gobernador de Baja Ca­lifornia, hizo unas declaraciones más que inoportunas sobre las mujeres. Dijo: están rebuenas todas para cuidar niños, para atender la casa, para cuando llega uno, y a ver mijito (póngase) las pantunflitas (sic) ( La Jornada, 11/3/15).

Adolfo Sánchez Rebolledo
Octavio Rodríguez Araujo
Un presidente como los de antes
L

a firme determinación del presidente Enrique Peña Nieto de insertar a un magistrado de su preferencia en la Suprema Corte de Justicia representa más de 10 pasos atrás en el proceso de cambio político. El Presidente les ha hecho la tarea doblemente difícil a quienes insisten en defender su supuesto ánimo reformista, pues tendrán que encontrar nuevos argumentos para convencernos de que estamos ante un presidente transformador. Lo que se rehúsa Peña Nieto a cambiar es la forma autoritaria de ejercer el poder que era característica del México del siglo XX.

China: factor de impulso global
L

os informes del presidente Xi Jinping y del primer ministro Li Keqiang, presentados a la reunión anual 2015 de la Asamblea Popular Nacional, que tiene lugar por estos días en Pekín, arrojan luz sobre el papel que China desempeñará, en el año en curso y más adelante, en la economía global, en la que se encuentra por completo integrada. Una cuestión muy debatida, al imaginar el futuro comportamiento de una economía global que aún no se libera de las secuelas de la Gran Recesión, es la de si China continuará jugando un papel positivo importante en la dinámica económica mundial, como fue el caso en los dos o tres primeros años del actual decenio. En ese periodo China fue el principal y quizá el único motor de la economía mundial. Sin embargo, desde 2014 por lo menos, China ha entrado en una fase que sus dirigentes denominan nueva normalidad, caracterizada, entre otros hechos, por tasas de crecimiento económico significativamente más bajas que las anteriores a la crisis. Esta nueva normalidad no es un fenómeno exclusivo de China, sino que se manifiesta en muchas otras economías avanzadas y emergentes. En otras latitudes se le han dado diferentes nombres: desde gran moderación, como se le menciona en los informes de algunos organismos financieros internacionales, hasta estancamiento secular, como han señalado economistas destacados tanto de Estados Unidos como de Europa. China se suma ahora a esta nueva normalidad y es importante tratar de apreciar lo que esto significa para el rol de la que quizá sea ya la economía nacional de mayor dimensión en el mundo.

Soledad Loaeza
Jorge Eduardo Navarrete
Parar el zarpazo yanqui contra Venezuela
E

stados Unidos ha demostrado a lo largo de casi dos siglos la naturaleza expansionista, agresiva, intervencionista, guerrerista y xenófoba de su política exterior.

Análisis estratégico para el desarrollo
E

n 2001 un analista de Goldman Sachs creó el acrónimo BRIC, refiriéndose a cuatro países emergentes: Brasil, Rusia, India y China. El argumento para formar este grupo era que en 2050 esos países podían ser dominantes globalmente. En ese 2001, de acuerdo con el Informe sobre el Desarrollo Mundial del Banco Mundial, los BRIC aportaron 8.4 por ciento del producto mundial. En 2014, de acuerdo con la misma fuente, su aporte al PIB mundial más que se duplicó, llegando a 19.6 por ciento, lo que implica que estos cuatro países produjeron casi la quinta parte del producto global.

Ángel Guerra Cabrera
Orlando Delgado Selley