Pablo Gómez, presidente de la comisión especial del Partido de la Revolución Democrática (PRD) que investigó la postulación de José Luis Abarca a la alcaldía de Iguala, aseguró que al ex edil lo doy por inocente mientras no se compruebe la culpabilidad.

En conferencia de prensa, ayer deslindó a Nueva Izquierda y a sus dirigentes nacionales de esa postulación y afirmó que no se conocían los nexos del ex alcalde y su esposa, María de los Ángeles Pineda, con el crimen organizado. Además, hubo un reconocimiento por parte de la comisión de que será muy difícil que en el PRD se puedan fincar responsabilidades estatutarias por el hecho.

Un día después de dar a conocer su informe final, Gómez aclaró que fue Sebastián de la Rosa, de Nueva Izquierda-Coduc –uno de varios grupos de la expresión en Guerrero–, quien invitó a Abarca a ser candidato.

Sin embargo, apuntó que en el informe hay una crítica a la falta de atención que puso la dirección nacional en las postulaciones de Guerrero.

Consideró que la responsabilidad política corresponde a un partido; no puede estar sobre los lomos de una sola persona, porque no tiene capacidad para tomar esa decisión, resaltó.

La aclaración la hizo casi media hora después de que Jesús Zambrano, presidente del PRD en 2012, cuando se dio la candidatura del empresario joyero, calificó de tendencioso y carente de toda responsabilidad señalar que Nueva Izquierda o él mismo fueran responsables de la postulación de Abarca.

El gobierno federal tiene responsabilidad

Zambrano manifestó que en la mesa de candidaturas en Guerrero no se consideraron los vínculos del ex edil con el crimen organizado porque el ex secretario de Gobernación Alejandro Poiré no le proporcionó información que los confirmara, después de que se la solicitó.

En este punto merece especial atención la evidente falla de los órganos de inteligencia del gobierno federal al mando de Felipe Calderón, subrayó.

El sábado pasado José Luis Abarca se entrevistó durante 150 minutos con una comisión especial del PRD, en el penal del AltiplanoFoto Ap

Por su lado, los integrantes de la comisión especial aclararon que los plazos para interponer recursos por la candidatura de Abarca vencieron. Pablo Franco mencionó que las impugnaciones debieron presentarse al momento de la postulación.

En derecho, los términos son fatales y si ya no se hicieron las denuncias para qué nos autoengañamos. Va a ser muy difícil que se puedan fincar responsabilidades jurisdiccionales estatutarias. Lo que sí está claro es que esto fue un golpe para el partido, puntualizó.

Como presidente de la comisión, Gómez –también representante del PRD ante el Instituto Nacional Electoral– señaló que la vinculación del matrimonio Abarca con la delincuencia organizada son cargos que no han sido demostrados en un tribunal.

A su vez, Octavio Cortés señaló que no están para lavarle las manos a nadie, mientras Gómez propuso que el consejo nacional del partido se reúna para tomar una resolución al respecto.

Al final de la conferencia, realizada en la sede nacional del PRD, Pablo Franco reconoció que evidentemente no aportará mucho el informe, pero hay que decir que es algo que a nadie le interesaba investigar, ni siquiera en el partido.

Los integrantes de la comisión dieron cuenta de que a José Luis Abarca lo entrevistaron durante dos horas y media en el penal del Altiplano el sábado pasado, en un cuarto pequeño, donde había una cámara que, según les dijeron, era de la Policía Federal.

Franco contó que el ex edil sostuvo su inocencia en todo momento respecto a los ataques a los normalistas de Ayotzinapa en Iguala, lo que seguramente le ayuda a descargar su conciencia. E hizo notar que los delitos que se le imputan tienen que ver con conductas previas a los hechos del 26-27 de septiembre.

Para Gómez, Abarca se inculpó cuando dijo que se fue a su casa el día de hechos, pero que estuvo al tanto de las acciones de la policía, que estaba bajo su mando, y que disparó contra los estudiantes.