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Gobierno de Tlaxcala apoya represión de la compañía, afirman

Dirigentes gremiales, con órdenes de aprehensión tras demanda de empresa
 
Periódico La Jornada
Viernes 11 de septiembre de 2015, p. 15

Miembros del comité y de la comisión de vigilancia del Sindicato Único de Trabajadores de Calzado Sandak se encuentran prácticamente en la clandestinidad, debido a que tienen órdenes de aprehensión en su contra ante las demandas presentadas por la empresa.

En una carta firmada por los asesores jurídicos del gremio, Eduardo Díaz, Arturo Alcalde, Carmen Moreno y Arturo Hernández, denunciaron que las acciones de la empresa por desconocer al sindicato y los derechos de los trabajadores han llegado a límites insospechados, ya que, además de que ha criminalizado la lucha, no le bastó con la represión y amenazas a los sindicalizados, sino que ha denunciado penalmente a sus dirigentes.

Pero aún más grave es que en estos hechos las autoridades judiciales de Tlaxcala han mostrado una franca colusión con la trasnacional y cumplen sus ordenanzas, al grado de detener y encarcelar a los dirigentes del sindicato. Primero al secretario de organización, Epifanio García Carrillo, el 20 de enero de 2015, y al secretario general, Gustavo Labastida, el 17 de agosto del presente año, preso por un delito que no cometió y que no podrá demostrar la empresa.

Autoridades parciales

Sostuvieron que la respuesta que hasta este momento ha dado el gobierno estatal al conflicto exhibe la parcialidad con la que se ha conducido en este caso, pues, además de acciones del Poder Judicial estatal contra los trabajadores, las autoridades laborales de la entidad han negado la toma de nota al comité ejecutivo del sindicato, al desconocer la personalidad jurídica del mismo, y han declarado inexistente la huelga.

Lo más burdo es que los empleados quieren regresar al trabajo y las autoridades se negaron a certificar su retorno a laborar al día siguiente de que se declaró ilegal la huelga, pero luego le siguieron el juego a la empresa, cuando ésta los acusó de haberse negado a reiniciar actividades.

Ante las declaraciones que hizo dicho gobierno sobre los sindicalizados de que ya no son trabajadores de la empresa sólo porque ésta depositó los finiquitos en la Junta Local del Estado, indicaron que para dar por terminada la relación laboral se necesita de una resolución de las autoridades laborales, dictada en juicio y con todos los elementos que conlleva un procedimiento.

Por ello, legalmente la relación laboral continúa, el contrato colectivo de trabajo está vigente y sigue pendiente la resolución del recurso de revisión ante el tribunal colegiado del vigésimo octavo de circuito, apuntaron, para luego concluir que el gobierno de Tlaxcala miente y se demuestra la actitud cínica, la ignorancia y mala fe con la que se conducen las autoridades de ese gobierno.