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Comparecerá en EU el jefe de la firma; autoridades germanas exigen acciones inmediatas

Juicios en Alemania y Francia atizan escándalo por trampas de Volkswagen
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En imagen de archivo, una automovilista posa en su Jetta Sportwagen diésel en Studio City, CaliforniaFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Sábado 3 de octubre de 2015, p. 21

Wolfsburgo.

Volkswagen, el mayor fabricante de vehículos en el mundo e inmerso en un escándalo por manipulación de emisiones contaminantes en sus motores diésel, afronta ahora en Alemania y Francia juicios por motores trucados, que se suman a los casos en Estados Unidos, donde fue destapado el problema.

Un inversionista alemán interpuso una demanda contra el fabricante por daños y perjucios ante un tribunal de Braunschweig, mientras en Francia se abrió expediente por fraude agravado.

En Estados Unidos Volkswagen está bajo presión para detallar en la próxima semana sus planes para realizar ajustes en 11 millones de vehículos diésel, ya que su jefe en ese país testificará el jueves ante los legisladores y los organismos reguladores alemanes exigen acciones inmediatas. El gobierno alemán ha dado a Volkswagen hasta el 7 de octubre para que presente una solución técnica y un calendario de reparaciones de los coches afectados por el escándalo.

La armadora tiene que modificar el software que le permitió superar con engaños las pruebas de emisiones, cuyo descubrimiento generó su mayor crisis empresarial en sus 78 años de historia.

Respecto de los procesos que se abrieron este viernes, un inversionista alemán que adquirió acciones preferentes en abril y julio reclama la devolución. El inversionista alega haber perdido cerca de 20 mil euros (unos 22 mil 300 dólares) a razón de 60 euros por acción por el deterioro de las participaciones.

El escándalo hizo caer más de un tercio el precio de las acciones, este viernes sus títulos perdieron otro 4.3 por ciento y se ubicaron cerca de su nivel más bajo en cuatro años.

En Estados Unidos están siendo preparadas querellas masivas de accionistas y usuarios contra la automotriz alemana, que también deberá afrontar el pago de multas millonarias.

La justicia de Francia también abrió el viernes pesquisas preliminares por cargo de fraude agravado y se puso en contacto con sus pares de la fiscalía de Braunschweig, que investiga en Alemania. En Francia hay unos 950 mil automóviles con motores con el citado software.

El mayor fabricante de automóviles del mundo admitió que el software en cuestión fue instalado en 2.8 millones de coches en Alemania y en más de 600 mil en España e Italia. En Estados Unidos fueron contabilizados unos 482 mil vehículos con motores manipulados.

La investigación francesa fue abierta por fraude agravado en una mercancía susceptible de ser peligrosa para la salud. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó en 2012 algunos gases de escape diésel de potencialmente cancerígenos.

Volkswagen dijo el jueves que tardará meses en llegar al fondo de su investigación sobre quién es el responsable del software, aunque prometió informar la próxima semana a la opinión pública sobre las soluciones halladas a los problemas. No obstante, analistas creen que será un reto realizar ajustes sin dejar a los vehículos con una economía de combustible y unas prestaciones reducidas, o necesitando más mantenimiento, problemas que podrían multiplicar potencialmente las demandas contra la compañía, mancillando más su reputación.

Mantendrá plantilla en México

La automotriz alemana mantendrá su actual plantilla laboral, producción e inversiones en México, afirmó este viernes el sindicato de trabajadores.

Ante una situación como ésta, nosotros como sindicato hemos mantenido un diálogo constante con los representantes de la empresa, dijo el líder sindical Antonio Flores Trejo a Radio Fórmula.

La planta de Volkswagen en Puebla es la segunda mayor de la automotriz alemana en el mundo después de su sede de Wolfsburgo y en ella se producen unos 500 mil vehículos al año, destinados en su mayoría a la exportación a Estados Unidos, donde estalló el escándalo. Unos 78 mil empleos directos e indirectos dependen de la fábrica.