Aguascalientes, Ags.

El obispo de Saltillo, Raúl Vera, afirmó que el caso Iguala se ha convertido en un “emblema, porque de ahí están saliendo a la luz pública cosas muy graves que están pasando en México. Ayotzinapa, dijo, representa el proyecto violento que este gobierno está utilizando para el control de la población mexicana.

“Esos jóvenes (los normalistas) no solamente son un grupo de estudiantes que buscaban para ellos mayores prestaciones y mayores garantías de poder formarse bien como maestros rurales.

“Esos maestros representan una conciencia social desarrollada. En ellos el gobierno tenía que ensañarse para decirnos a todos: ‘señores, ni se pongan en ese plan a buscar justicia ni a exigirnos’. Es eso, pero es que no lo hacen nada más en Ayotzinapa, porque ahí se ve otra cosa más terrible que es ese control violento que quiere hacer el gobierno mexicano de la población nacional, ya que no están ahí nada más las fuerzas policiacas, sino también el Ejército.

“Acaba de declarar el señor (Salvador) Cienfuegos (secretario de la Defensa Nacional) que la OEA (Organización de Estados Americanos) no tiene autoridad para exigirle justicia. Pues, ¿qué no existen los compromisos internacionales?

Entonces apague y vámonos señor Cienfuegos; que le diga al gobierno que corte las conexiones con los estados americanos. Sí él cree que no tiene nada que ver una organización como esa para exigirle al Ejército justicia, ¡por amor de Dios!, expresó.

“En la diócesis de Saltillo vemos que no hay búsqueda de los desaparecidos, punto y se acabó. Igual que para todas las ejecuciones extrajudiciales que hemos tenido y las estamos teniendo en México.

“Tenemos el caso Tlatlaya, en el que están liberando a los soldados. Tenemos a la Policía Federal haciendo ejecuciones de aquellos del grupo de los 250 que contrataron y ayudaron a las autodefensas para que se lograra detener a (Servando Gómez) La Tuta y no les pagaron. Por el hecho de haber ido a Apatzingán y por haber ido a reclamar, llegó la Policía Federal a asesinarlos”, señaló.

Entonces esto representa Ayotzinapa: la impunidad, porque es algo pensado, es algo proyectado desde dentro de la estructura gubernamental. Esto es lo grave, es algo organizado contra el pueblo mexicano por la violencia, indicó el obispo.