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El cantautor invita a la segunda edición del Trova Fest, que comienza hoy en Quéretaro

Los trovadores se masifican sin cambiar su mensaje: Oceransky

La propuesta es la misma, sólo que ahora llegamos a más gente; ya no estamos en los 70, dijo en entrevista

Entre los 30 artistas que actuarán hasta el próximo domingo se encuentran Luis Eduardo Aute, Francisco Céspedes, Pedro Guerra y Alejandro Filio, informó el organizador

 
Periódico La Jornada
Viernes 13 de noviembre de 2015, p. 8

Desde hoy y hasta el domingo 15 de noviembre se relizará en la ciudad de Querétaro el Trova Fest 2015, segunda edición de una muestra sobre la canción que da un punto de vista sobre la vida y sus vicisitudes, informó Édgar Oceransky, organizador, en entrevista.

Agregó que las fechas coinciden con el puente por el 20 de noviembre, razón más que suficiente para darse un tiempo y viajar a la bella y ahora moderna Querétaro. “Cantarán 10 trovadores cada día; es decir, serán 30 en total, y el país invitado es España, con voces como las de Luis Eduardo Aute, Pedro Guerra, Inma Serrano, Ella Baila Sola, Diego Ojeda y otros. De Cuba particparán Pancho Céspedes y Frank Delgado, y de México, Alejandro Filio, Mexicanto y Ornelas, entre otros. Unos más de Puerto Rico.

“Pudieron haber sido más, porque afortunadamente hay una red latinoamericana de cantautores. No obstante, el propósito de esta edición es dar continuidad a lo logrado con el primero, y así cada vez. En 2014 fueron 20 trovadores. Aumentaremos, si la Cámara de Diputados nos sigue apoyando con presupuesto.

El año pasado asistieron 30 mil personas. Prevemos que ahora lleguen 40 mil, lo cual deducimos por el impacto en redes sociales. Los trovadores llegarán entusiasmados porque se difundirá su obra ante miles de personas, porque será masivo. Todo se realizará en la Plaza Fundadores, junto al Templo de la Cruz.

Así, el Trova Fest se echa un quién vive con el Corona Capital, que tiene mucha más difusión y es caro. Oír a los trovadores es gratis. Esperamos crecer un poco más, pero no tanto, porque la plaza no da más. Si se da demasiada demanda buscaremos otro lugar en 2016, quizás un estadio o una plaza de toros.

Los propósitos son, hacia el público, mostrar una diversidad lo más amplia posible de la canción de autor, que no se crea que tiene una vertiente, un solo tipo de influencia, de letra o de temática.

Hacia la industria, mostrar a diversos sectores que esta música permea en la sociedad, mucho más allá de lo que se nota o piensa. “Esta música no tiene difusión porque se cree que no tiene seguidores. Si de por sí la industria discográfica está desapareciendo, los empresarios creen que no tiene convocatoria, pero ya hemos demostrado que no es así, porque aun sin gran difusión reunimos a 30 mil personas en 2014. Hacia el exterior, buscamos conectarnos y conocernos entre nosotros, para estrechar lazos que trasciendan más allá del festival.

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En entrevista, Édgar Oceransky comentó que en algunos países los gobiernos apoyan a sus cantautores, como en Cuba y Venezuela, pero nosotros tenemos que hacer todo, en la autogestiónFoto Yanko Bibriesca

Del primer Trova Fest surgieron giras, una de ellas de Pedro Guerra y yo. El festival se repitió en Guatemala. Nos comunicamos y eso tiende redes, antes imposibles, porque trabajábamos en nuestros ámbitos locales.

Enriquecimiento cultural

Hay trovadores que no quieren enlodarse con el mundo comercial de las trasnacionales, para no vender su alma al diablo. Esto los metió en una ostra. Ahora estamos más dispuestos a acercarnos a los medios masivos de comunicación, porque ello no implica un cambio de mensaje o de propuesta. Sólo estás llegando a más personas. El mundo de ahora es distinto al de los años 70, cuando había dictaduras militares. Hoy no es todo tan radicalizado, tan blanco y negro. Las temáticas e influencias están muy diversificadas. Conocer lo que se hace en otros sitios enriquece culturalmente.

No todo es poesía. En México no hay una política cultural de Estado que se note. Hay gasto en hechos culturales. En algunas naciones los gobiernos han apoyado a sus cantautores, como en Cuba y Venezuela, pero nosotros tenemos que hacer todo, en la autogestión. No hay un semillero, alguien que esté formando. Hay esfuerzos muy valiosos que vienen de la iniciativa privada, como la beca María Greever o la Fundación Harp. El recurso que conseguimos lo fuimos a buscar. Al gobierno se le ha olvidado que sus artistas son su mejor carta de promoción.

Puede obtener más información en redes sociales.