Sociedad y Justicia
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Por lo general detienen a extranjeros después de cambiar divisas, señalan testigos

Policías federales roban a usuarios del AICM en revisiones arbitrarias

Los agentes llevan a las víctimas al estacionamiento, donde negocian su liberación, afirman fuentes del aeropuerto

Responden con amenazas a las personas que cuestionan sus acciones

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El miércoles pasado, agentes federales revisaron con prepotencia a un turista de origen asiático, a quien exigieron que se quitara la chamarra y se identificara mientras revisaban todas sus pertenencias. Me trataron como un delincuente , señaló el viajeroFoto La Jornada
 
Periódico La Jornada
Viernes 4 de diciembre de 2015, p. 44

Elementos de la Policía Federal (PF) que resguardan las instalaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) realizan revisiones arbitrarias a turistas nacionales y extranjeros.

Testigos dentro del aeropuerto capitalino señalaron que cuando algunos policías se dan cuenta de que personas de otro país realizan operaciones en los centros cambiarios, las detienen en los pasillos con el pretexto de verificar su estado migratorio, pero en realidad es para quitarles dinero.

Dijeron que los agentes de seguridad paran a los viajeros en salas de llegadas internacionales después de atravesar los últimos filtros migratorios para preguntarles su origen y ocupación.

Al realizar un recorrido el pasado miércoles en el ambulatorio de la Terminal 1, varios usuarios se sorprendieron al observar cómo dos policías federales revisaron de manera prepotente a un turista de origen asiático, a quien tenían con las manos arriba.

Le quitaron la chamarra, le pidieron una identificación y sacaron todas sus pertenencias. De inmediato pasajeros que caminaban por la zona se detuvieron para sacar fotografías y videos.

Varios pasajeros les gritaron abusivos y les exigieron que lo soltaran, pues no era un criminal. Los policías se enojaron e intimidaron a los viajeros exigiéndoles que no los grabaran, pero ante la negativa, los uniformados también sacaron sus dispositivos móviles y comenzar a filmar.

No se vale. Me sentí humillado. Me trataron como un delincuente. Cuando visitas un país la primera impresión son las instalaciones del aeropuerto y la gente que te encuentras, manifestó el agraviado, quien iba acompañado de dos amigos que se notaban conmovidos.

Otro caso similar ocurrió a mediados de noviembre. Dos integrantes de la PF se acercaron a viajeros sudamericanos. Verificaron sus documentos, pero no fue suficiente. Minutos más tarde los llevaron al segundo piso del estacionamiento, aunque los extranjeros no llevaban carro.

A pesar que en el aeropuerto hay más de 900 cámaras de vigilancia, las fuentes consultadas comentaron que hay puntos ciegos que aprovechan los policías para negociar con las personas.

En octubre de 2014, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) inauguró sus módulos de respuesta inmediata y primer contacto en las terminales 1 y 2 del AICM con el fin de ofrecer asesoría legal, atención médica sicológica y de trabajo social a víctimas de violaciones a los derechos humanos.

En esa ocasión, su presidente, Sergio Jaime Rochín, aseveró que los módulos están listos para otorgar apoyo pleno a las personas que transiten por las inmediaciones del aeropuerto y sean víctimas de trata, abusos, secuestros, desapariciones, violaciones a sus derechos humanos o cualquier otro delito de alto impacto. Agregó que personal especializado acompaña en todo momento a las víctimas y hace las gestiones necesarias ante autoridades federales y locales para coadyuvar a la reparación del daño.

La mayoría de los pasajeros desconocen dónde se ubica el CEAV, debido a que carecen de información y éste está aislado.

No son las únicas ocasiones en que se han cometido estos abusos. En 2013 trabajadores del órgano interno de control de la Secretaría de Gobernación recorrieron pasillos, ambulatorios y salas de espera de las terminales 1 y 2 del AICM para verificar que elementos de la Policía Federal no revisaran a pasajeros y equipajes en lugares no autorizados ante diversas denuncias de los viajeros.