Mexicanos residentes en el exterior enviaron al país 22 mil 576.35 millones de dólares entre enero y noviembre de 2015, lo que representó un crecimiento de 5.44 por ciento en el monto de esos recursos respecto del periodo similar del año previo, informó el Banco de México (BdeM).

Ese monto fue superior en mil 260.27 millones a las captadas durante enero-noviembre de 2014. Sin embargo, medidas de manera mensual, las remesas registraron una caída de 180.96 millones de octubre a noviembre, 8.74 por ciento, al pasar de 2 mil 68.82 millones a mil 887.86 millones, respectivamente, para cada mes.

Así, las remesas se mantienen como la principal fuente de divisas del país, incluso por arriba de las exportaciones petroleras. El monto acumulado de envíos de dinero a México fue de 4 mil 878.35 millones de dólares, cifra superior a los 17 mil 698 millones generados por las ventas de crudo al exterior, es decir, 27.56 por ciento más.

Sobre el comportamiento de los envíos de dinero al país, expertos del grupo financiero BBVA-Bancomer explicaron:

En buena medida el crecimiento de las remesas a lo largo de 2015 se relaciona a factores como el desempeño de la economía de Estados Unidos, la creación de empleos para los migrantes mexicanos en aquel país y la fuerte apreciación del dólar observada a lo largo del año. El número de operaciones para el envío de remesas alcanzó 6.7 millones de transacciones durante noviembre, con un aumento de 7.9 por ciento respecto del mismo mes de 2014. Esta alza en la frecuencia de envío de dinero compensó en gran medida la caída observada en la remesa promedio, que se ubicó en 282 dólares, con un decremento de 1.4 por ciento a tasa anual. La racha positiva de las remesas, experimentada en los pasados 10 meses, ha llevado a acumular durante todo 2015 un monto de 22 mil 576.3 millones de dólares, con un crecimiento de 5.4 por ciento respecto del monto acumulado en igual periodo de 2014.

La opinión de especialistas

Pero para especialistas del grupo financiero Scotiabank, el comportamiento de las remesas no queda sólo en el mero monto y flujo de recursos al país. Éstas, dijeron, son una relevante fuente de divisas para el país, que tienen una importante incidencia en el consumo de los principales estados adonde se remiten y que ubican a México como uno de sus principales receptores a escala mundial.

Si bien los mil 887.86 millones de dólares de noviembre, que implicaron una baja mensual, al mismo tiempo registraron su mayor crecimiento en tres meses, en tanto que el acumulado en el año fue el monto más alto para un lapso similar desde 2008, cuando fue de 23 mil 363 millones de dólares.

Más aún: al tipo de cambio promedio de 16.63 pesos por dólar registrado en noviembre, las remesas ascendieron a 31 mil 400 millones de pesos, 30.1 por ciento más que el monto de un año antes (24.1 mil millones de pesos a un tipo de cambio promedio de 13.597 pesos por dólar), lo que explica parte de la favorable dinámica del consumo que se registra en el país.

Los expertos de Scotiabank también atribuyeron la positiva dinámica de las remesas a un reflejo de un persistentemente sólido número de transferencias (6.7 millones), cuyo comparativo anual aceleró de 4.5 a 7.9 por ciento, para acumular 31 alzas en los pasados 32 meses, aunque su valor promedio se moderó por tercer mes consecutivo (a 281.9 dólares), así como de la solidez del empleo en el sector constructor en Estados Unidos, principal demandante de mano de obra procedente de nuestro país y en donde se originan mayoritariamente las remesas, el cual mejoró en noviembre de 6.444 a 6.490 millones de plazas, y del número de empleados de origen latino que en el mismo mes reportó un nuevo máximo histórico (24.547 millones).