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Astillero

De nuevo, cenicientos

Recortes a gobernabilidad

Van contra Arias Montes

Libien, periodismo a revisar

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RENDIR CUENTAS. Juan Manuel Portal, titular de la Auditoría Superior de la Federación (al fondo), entregó ayer a la Cámara de Diputados el Informe general de la cuenta pública 2014Foto José Antonio López
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arias horas antes de que dejara el país la carroza vaticana, ya estaba reinstalada la calabaza sabida de la cenicienta realidad real de México. Aún se entretenían largamente los medios, sobre todo los electrónicos, en la degustación final del religioso banquete adormecedor de seis días cuando ya estaban los cardenales Luis Videgaray y Agustín Carstens anunciando las penitencias presupuestales y bancarias por venir, en la primera caída de un viacrucis económico nacional que, como siempre, porque así lo ordenan el dios dinero y sus terrestres oficiantes empresariales y políticos, dejará crucificados a los de abajo y bendecidos a los de arriba.

El previsto recorte presupuestal (lo que usted sabía o intuía, pero temía confirmar, cuando menos no antes de que se fuera el Papa) y la elevación de la tasa de interés en México (50 puntos base, para quedar en 3.75 por ciento) forman parte de un conjunto de medidas que tratan de enfrentar factores internacionales ajenos al control del gobierno peñista, más la abundante carga de errores, distorsiones, despilfarros y corrupción que en el entorno local produce y alienta ese mismo gobierno.

La presentación en sociedad de las nuevas desgracias por venir agrega riesgos a la muy discutible gobernabilidad del país, pues significará un nuevo apretar de cinturón para los que ya hasta de él carecen, mientras las cúpulas negocian formas de no resultar con tanto daño (el excelente jugador tapatío de palabras Óscar Tagle así tuiteó ayer mismo: Carstensiana desde Banxico: apriétese el cinturón en las lonjas de mi compadre).

A la muy preocupante acumulación de rezagos e insatisfacción sociales, con derivaciones marcadas hacia la confrontación directa de lo institucional, deberá sumarse el resultado de esta menor disponibilidad de recursos públicos y el nuevo posicionamiento del Banco de México (no sólo en cuanto a tasas de interés; también se informó que se cancelan las subastas de dólares, para ejercer la discrecional facultad de venderlos directamente, conforme a las circunstancias). Menos dinero y peores condiciones para atender las urgencias populares que van subiendo de grado. Por lo pronto, asegura el virrey Videgaray que no se tocarán los rubros de seguridad, es decir, de policías y militares en caravana por el país (siempre emplazados para sofocar no sólo las acometidas del crimen políticamente organizado, sino también los desbordamientos de corte político o social), ni de políticas sociales (y menos en un año electoral que al mismo tiempo se encuadra en la tempranísima lucha por la sucesión presidencial de 2018).

El golpe más fuerte en este recorte anunciado es contra Pemex, empresa a la que se condena a la quiebra, ya con el concuño de Carlos Salinas de Gortari como director de liquidación (la especialidad de la casa Salinas, recuérdese, han sido las privatizaciones y otras formas de conversión de la riqueza pública en privada). Esta semana, Newsweek en español llevó como principal tema de portada un reportaje de Ana Lilia Pérez Mendoza (la autora de libros como Camisas azules, manos negras; El saqueo de Pemex desde Los Pinos, y Mares de cocaína) cuyo título asegura que se prepara la subasta de Petróleos Mexicanos. Bien, pícaro Charlie y familia que le acompaña.

Finalizada la gira de preparación espiritual de México para lo que las turbulencias le deparen, Francisco dejó intocados los temas de la pederastia clerical y de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa (en este tema, su vocero Lombardi ejecutó una versión vaticana del famoso cansancio murillista). Sin embargo, en Oaxaca, un abogado cercano a la arquidiócesis ofreció una conferencia de prensa para apremiar a las autoridades a que actúen legalmente contra el presbítero católico Mario Arias Montes, quien ha denunciado dentro de la propia iglesia local, e incluso en el Vaticano, la protección del arzobispo José Luis Chávez Botello a los abusos sexuales cometidos cuando menos contra unos 45 niños indígenas de la sierra zapoteca por el cura Gerardo Silvestre Hernández, a quien se permitió durante largos años continuar con su depredación sexual hasta que la denuncia de un padre de familia lo llevó a la cárcel, donde espera una sentencia ligera.

El sábado en que ya estaba Francisco en México, La Jornada publicó una nota (http://goo.gl/UqHRfQ) y dos videos relacionados con el tema (https://goo.gl/N4sHko y https://goo.gl/W0CUZV). Ahora ese sacerdote denunciante está bajo la amenaza de cárcel y proceso judicial por la acusación de violencia familiar contra una mujer con la que habría hecho vida de pareja. Ésta y todas las acusaciones fundamentadas deben ser atendidas con prontitud y rectitud por el aparato judicial mexicano que apabullantemente actúa en sentido contrario, es decir, con demora infinita e incorrección procesal y sustantiva.

Si Arias Montes cometió un delito debe ser castigado en los términos correspondientes a esos presuntos hechos, sin que ello empañe o desacredite las acusaciones fundadas que él y nueve religiosos más (párrocos y diáconos) han hecho respecto a la masacre sexual cometida contra indígenas menores de edad en Oaxaca. Doctor en teología, reconocido intelectual, promotor de un cristianismo con sentido indígena, Arias Montes ha librado y sostiene una batalla contra la pederastia clerical protegida desde las cúpulas eclesiásticas.

La agresión contra el administrador general de la delegación Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, Arne aus den Ruthen, por guardaespaldas de Rubén Libien, va más allá del entorno natural de esa demarcación desde donde el PAN podrá alcanzar especial fuerza para las elecciones de 2018 de jefe de gobierno. En realidad, lo que está a la vista es la prepotencia, la vocación infractora, delictiva, de muy peculiares grupos empresariales que realizan un tipo de periodismo absolutamente discutible, financiado y protegido por ciertos segmentos políticos, como en este caso los políticos priístas del estado de México, con erarios predispuestos para beneficios oscuros. ¡Hasta mañana!

Twitter: @julioastillero

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