Opinión
Ver día anteriorLunes 29 de febrero de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
De nuestras Jornadas

Repuntan los homicidios

E

n pleno repunte de la violencia ligada al crimen organizado, que se hace evidente con ejecuciones en el primer cuadro de la ciudad de Tijuana, Baja California, el regreso de narcomantas y algunos secuestros, el alcalde Jorge Astiazarán Orcí pidió la renuncia al secretario de seguridad pública municipal, Alejandro Lares Valladares. La decisión llegó el mismo día (el viernes pasado) en que un grupo de regidores y el secretario general de gobierno municipal, Bernardo Padilla, también dimitieron o pidieron licencia para buscar una candidatura a diputados por sus respectivos partidos.

Con mil 311 homicidios contabilizados en esta gestión –en la anterior la cifra total fue de mil 250, y a ésta todavía le faltan varios meses para que concluya–, Lares anunció su salida mediante un comunicado de prensa en el que argumentó que fue para frenar una perversa campaña mediática contra la dependencia que encabezaba; sin embargo, horas más tarde el alcalde fue muy enfático en afirmar que él le había pedido la renuncia, es decir, que lo había despedido. El tono llamó la atención porque Astiazarán había defendido en repetidas ocasiones al joven Lares, a quien conoció como camillero durante sus años de médico de urgencias de la Cruz Roja de Tijuana.

Últimamente todos los días aparece un muerto por aquí y otro por allá, y la sociedad en general y las cámaras empresariales se han empezado a preocupar porque no quieren que regresen los años en que esto era un campo de batalla entre grupos del crimen organizado. La inseguridad acaba no sólo con la tranquilidad de quienes aquí viven, sino con la economía local, fincada en buena medida en el turismo; médico en primer lugar, y recreativo (gastronomía, vino y centros nocturnos). Alejandro Lares consiguió bajar los índices de todos los delitos, menos los homicidios ligados a la compraventa de drogas. Así que el alcalde tendrá que informar a la ciudadanía si el policía Lares se va porque se comió algo o simplemente porque la pugna entre cárteles (el de los Arellano Félix y el de Sinaloa) le ganó la batalla.