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Cometen irregularidades casi 35% de los verificentros, afirma Sedema

El gobierno retiró concesiones a 14 de 81 instalaciones por no cubrir requisitos: Müller

Otras 5 fueron clausuradas de forma parcial, una total, y en 8 se cerraron líneas de revisión

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Las anomalías más recurrentes detectadas en los verificentros son la presencia de coyotes, la falta de prueba visual y el otorgamiento de hologramas que no correspondenFoto José Antonio López
 
Periódico La Jornada
Lunes 4 de abril de 2016, p. 36

Por incurrir en irregularidades, como entregar hologramas que no correspondían a las emisiones del vehículo, hacer pasar una unidad por otra o no cumplir con todos los requisitos para la renovación, el Gobierno de la Ciudad de México retiró la concesión a 14 de los 81 centros de verificación que operan en esta metrópoli, mientras otros 14 han sido clausurados total o parcialmente, informó la titular de la Secretaría de Medio Ambiente local (Sedema), Tanya Müller García.

Explicó que cada dos años la dependencia a su cargo valora la operación de los verificentros y se establecen nuevos requisitos. En suma: somos más exigentes.

En entrevista desmenuzó que del proceso de revalidación que se llevó a cabo a los 81 centros de verificación, en 14 se detectaron anomalías, por lo que no se les renovó la concesión para este año, mientras a los restantes se les otorgó por dos años más.

Abundó que de los 67 centros de verificación que quedan, en lo que va del primer semestre de 2016, cinco se clausuraron de manera parcial y uno total, y se suspendió el servicio de ocho líneas debido a anomalías en la transmisión de videos al Centro de Inspección y Vigilancia Ambiental Remota (Civar). Estos 14 casos están en trámite, los afectados pueden responder a lo que les corresponde por derecho, aclaró.

Müller García refirió que entre las irregularidades más recurrentes están: la presencia de personal no autorizado –gestores o coyotes, como se les conoce– en áreas restringidas; no realizar la prueba visual como parte del proceso de verificación y, en el caso de que las que no consiguieron la concesión, fueron más contundentes: otorgaron hologramas que no correspondían a las emisiones del vehículo.

A raíz de un estudio del Centro Mario Molina hace cuatro años, se replanteó el manejo de los verificentros mediante un software controlado por el Gobierno de la Ciudad de México, el cual permite la supervisión en tiempo real vía remota, la transmisión de imágenes de video y la revisión del procedimiento en la prueba ambiental de cada auto.

Al respecto, la secretaria afirmó con la instalación del software, las cámaras de vigilancia remota, las patrullas ecológicas –dedicadas a corroborar que la gente cumpla con la verificación– y la nueva imagen de los centros de verificación, el gobierno capitalino ha actuado de manera integral no sólo para mejorar la atención a los usuarios, sino en el cumplimiento con un tema de cero tolerancia ante cualquier irregularidad que se presente.

Advirtió que de la vigilancia que se hace en el campo con las patrullas ecológicas, 65 por ciento de los vehículos sancionados no tienen la verificación vehicular vigente. Es un caso muy interesante, porque el cumplimiento de esto le permite saber al propietario cómo está su carro, si requiere de un convertidor catalítico, de una afinación o el nivel en que se encuentra.

La titular de la Sedema indicó que en lo que va de este semestre se han presentado 100 denuncias en su mayoría por la presencia de gestores, aunque hay otras que no son irregularidades propiamente, sino quejas por el tiempo que tardan en verificar.

Las secretaria pidió a los ciudadanos utilizar las redes o llamar; cada centro tiene un verifitel que los enlaza de manera directa a la Secretaría de Medio Ambiente, para denunciar cualquier irregularidad.