Monterrey, NL.

Integrantes de la Caravana por la Paz, la Vida y la Justicia, que salieron de Honduras con destino a Nueva York, Estados Unidos, participaron ayer en el Foro Social Nuevo León, donde dialogaron sobre migración y víctimas del narcotráfico; destacaron la lucha contra el paradigma de la persona ilegal o indocumentada y contra la visión del sueño americano.

Durante su participación, el obispo de Saltillo, Coahuila, Raúl Vera López, dijo que la estrategia militar de combate a las drogas que aplicó el gobierno de México debe cambiar por un programa médico-educativo.

Afirmó que el uso de la fuerza obedece a las presiones de Estados Unidos, porque en vez de combatir a los cárteles de la droga los ha fortalecido. Esta guerra ha sido contra la población, y debemos detenerla, sostuvo.

Reunidos en el Museo de las Culturas Populares, integrantes de la caravana y del foro social escucharon historias de personas provenientes de Colombia, Uruguay, Honduras, El Salvador, Guatemala y México, en las cuales el común denominador fue el abuso que sufren los migrantes.

Myrna Lazcano Olivares afirmó que este jueves, en Nuevo Laredo, se entregará a las autoridades de Estados Unidos y solicitará asilo, con base en el derecho de madres e hijos a vivir en familia. Tengo tres años de que me deportaron. Viví 15 como indocumentada en Nueva York y desde entonces no he visto a mis hijas; ahora ellas tienen cinco y 11 años de edad, señaló.

Lazcano Olivares es una de los 50 integrantes de la caravana que salió el pasado 28 de marzo de Tegucigalpa, capital de Honduras, que pretende llegar a Nueva York y participar en la sesión especial convocada por la asamblea general de la Organización de Naciones Unidas sobre política de drogas, que comienza el 18 de abril.