El dueto de nado sincronizado de Nuria Diosdado y Karem Achach espera lograr un resultado histórico para el país en los Juegos Olímpicos de Río 2016, al avanzar a las finales del certamen, aprovechando la inercia que ha mantenido en las competencias más importantes a las que han acudido recientemente.

Las competidoras destacaron que en buena medida las mejores calificaciones logradas –en el Abierto de Japón ganaron bronce– mucho tienen que ver con el cambio de la coreografía, ya que ahora no tienen música ni parte de la cultura mexicana en sus rutinas, sino piezas de otras naciones, que son mejor evaluadas por los jueces.

Nuria, quien acudirá a sus segunda cita cuatrienal, recordó que en el pasado los países se aliaban de acuerdo con sus intereses y eso perjudicaba a México, pero ahora, con el cambio en la forma de calificar las rutinas, ya no es tan fácil que no se evalúen las presentaciones adecuadamente, además de que el rendimiento de las nadadoras nacionales cada vez es mejor.

Aunque no han desaparecido esas alianzas, que mucho han perjudicado a los que no tienen una consistente tradición o historia en esta disciplina, la competidora insistió en que la calidad mostrada y la apertura que se ha dado es lo que ayudó al desarrollo del nado mexicano en el ámbito mundial.

No hace mucho la entrenadora Adriana Loftus mencionaba el salto cuantitativo logrado en esta disciplina en el presente ciclo, recordó Diosdado, en relación con que no se avanza de la noche a la mañana, sino que son años y años de estar picando piedra.

Con el décimo puesto en el que se ubican a nivel mundial, nuestra meta va más arriba; debemos pensar en grande y buscar los mejores resultados, agregó.

De 1.69 metros de estatura y un peso promedio de 54 kilogramos, las ondinas saben que tienen una misión difícil de cumplir. De ahí la importancia de aprovechar las pocas competencias a las que pueden acudir antes de agosto, como el Abierto de España, aunque estudiaremos qué países competirán para ver si es prudente asistir, ya que la rutina debe guardarse lo más que se pueda para que no la conozcan los otros países.

En su oportunidad, Karem dijo que sólo de pensar en el lugar en que está el dueto en el mundo se me enchina la piel de emoción, por lo que espera hacer historia en la justa brasileña, y más ahora con la rutina que vamos a presentar, que nos sacó de nuestra zona de confort y eso ha gustado a los jueces.