La aplicación del doble Hoy no circula ha generado un incremento por día hasta de 825 mil personas en la red del Metro, que ha derivado en aglomeraciones en sus estaciones, al igual que en el Metrobús, y largas filas de espera para subir a los trolebuses o unidades de la Red de Transporte de Pasajeros.

La gratuidad de estos últimos servicios ha provocado que la gente espere hasta 40 minutos para lograr abordarlos, mientras quienes necesitan llegar más rápido a su destino han tenido que gastar entre 30 y 100 pesos diarios al utilizar dos o tres modos de transporte.

Dicho monto se llega a duplicar si se utilizan taxis o el servicio de Uber, cuyos conductores respetaron el acuerdo alcanzado con las autoridades capitalinas de no cobrar más de 2.9 veces más respecto de la tarifa normal, al salir de circulación un promedio de 2 millones de vehículos.

En la presentación de una campaña para que los usuarios utilicen las escaleras fijas, el director del Metro, Jorge Gaviño, explicó: no podemos no cobrar el servicio, porque estamos subsidiando a cada pasajero con ocho pesos a través de la no inversión en mantenimiento, vías o pilotaje automático.

Destacó que se registra un alza de entre 7 y 15 por ciento de usuarios en las contingencias, sobre los 5.5 millones que diariamente lo utilizan, lo cual nos lleva a reducir los intervalos de paso de los trenes, de cuatro a dos minutos, desde las 5 horas, para evitar aglomeraciones en las estaciones, aunque éstas se han dado, porque la gente está dejando su carro.

El uso de las mejores técnicas de tacleo se ha convertido en una constante en las estaciones de correspondencia o terminales del Metro, pues debemos esperar hasta 30 minutos para lograr subirnos, porque hay un montón de gente, comentaron usuarios.

Una situación similar se observó en las líneas del Metrobús, siendo la de Insurgentes la más problemática, porque está al tope y los autobuses no son suficientes para llevarse a la gente, que debe decidir entre esperar o buscar otra forma de llegar a su destino.

Los problemas de tráfico, sin embargo, continuaron en vialidades como Reforma, Periférico y Circuito Interior, pese a la reducción de vehículos en circulación, e inclusive se pudieron observar autobuses foráneos, altamente contaminantes, que circulan sin ningún control, lo que ocasiona mayores embotellamientos.

Los usuarios de Ecobici también sufrieron este endurecimiento del programa Hoy no circula, pues tuvieron que caminar varias calles para encontrar una bicicleta, debido a que las cicloestaciones se encontraban vacías.

No obstante la contingencia, algunos deportistas corrieron en camellones, parques o deportivos, y en construcciones privadas pequeñas se continuo con el trabajo de edificación sin que ninguna autoridad lo prohibiera.

(Con información de Laura Gómez Flores, Rocío González Alvarado, Josefina Quintero Morales, Ángel Bolaños Sánchez y Bertha Teresa Ramírez)