El gobierno federal obtuvo en 2015 ingresos por más de 112 mil millones de pesos solamente por el diferencial de 4.54 pesos en los precios a los que se vende la gasolina en México y el precio del combustible que se importa de Estados Unidos. Esta cifra fue mayor al recorte de 100 mil millones de pesos en Petróleos Mexicanos (Pemex) anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en febrero pasado.

Durante el año pasado el precio de la gasolina Magna en el país fue 50 por ciento superior a su similar que se vende en Estados Unidos. Mientras, la gasolina de categoría regular se vendía en aquel país en un promedio equivalente de 9.03 pesos por litro y en México se vendió en 13.57 pesos.

Considerando que México importa 426 mil 600 barriles diarios, y cada barril tiene un contenido de 159 litros, se comercializan 69 millones 829 mil 400 litros por día, con lo que anualmente se venden en México 24 mil 757 millones 731 mil litros de gasolinas importadas, cuyo diferencial de precios fue de 4.54 pesos por litro.

La gasolina, como otros combustibles, es un mecanismo de recaudación en la que los elevados precios que hay en México están asociados a una amplia proporción de impuestos.

La gasolina Magna, que históricamente era más barata en el país que su similar en Estados Unidos, de donde proviene 90 por ciento de las importaciones de este combustible, tuvo un aumento a partir de 2013, revelan informes oficiales.

Lejos de una reducción en los precios de las gasolinas entre 2014 y 2015 se observó un diferencial creciente, que fue de entre 2.3 y 4.54 pesos por litro, respectivamente. Lo anterior, pese a que los precios de las gasolinas a nivel internacional llevan alrededor de 15 meses de disminuciones.

Entre 2010, 2011 y 2012 la gasolina Magna, la más utilizada por el parque vehicular de México, fue más barata que la que se comercializaba en Estados Unidos, revela el Diagnóstico de la industria de petrolíferos en México, elaborado por la Secretaría de Energía (Sener).

De acuerdo con el análisis difundido por la Sener con base a datos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Energy Information Administration, en 2010 la gasolina Magna tenía un precio de 8.76 pesos por litro, es decir, 25 centavos menos que la gasolina regular de similar calidad que se vendía en Estados Unidos a 9.01 pesos por litro.

En 2011 la gasolina Magna se vendía a 9.73 pesos por litro contra la regular, con un precio de 10.88 pesos, lo que significaba que la gasolina que se comercializaba en territorio nacional tenía un costo 1.15 pesos menor.

Para 2012 la Magna llegó a un promedio de 10.81 pesos por litro, mientras la regular costaba 11.81, un peso más por litro.

Sin embargo, cuando se discutía la reforma energética y luego se aprobó el 20 de diciembre de 2013, la tendencia cambió y la Magna aumentó a 12.25 pesos por litro, mientras la regular se cotizó en 12.25, es decir, un diferencial 1.15 pesos en contra del precio de la gasolina estadunidense.

Para 2015 la banda de diferencial de precios se amplió, pues mientras en Estados Unidos la gasolina regular costaba un equivalente a 9.03 pesos por litro en México la Magna se comercializó en 13.57 por litro, un sobreprecio de 4.54 pesos.

La miscelánea fiscal y la Ley de Ingresos de la Federación 2016 define que entre este año y 2017 la política de precios máximos y mínimos se regirá bajo una banda de más/menos 3 por ciento, considerando la evolución de la inflación y los precios internacionales.

A partir del primero de enero de 2016 se permite la venta al público de combustibles de Pemex y de otras marcas, y a partir del primero de abril se permite la libre importación de combustibles.

En 2018 los precios del mercado de gasolinas se liberalizarán con base en las condiciones del mercado internacional.