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Rodolfo Obregón compendia nueve crónicas; publica El Milagro

Ofrece experto una perspectiva sui géneris del hecho teatral
 
Periódico La Jornada
Martes 28 de junio de 2016, p. 7

El compendio Sin ensayar: crónicas de un mundo casi tan grande como el teatro tiene la finalidad de ofrecer una perspectiva distinta de lo que es el hecho teatral, visión en la que se pone en juego no el resultado de un trabajo escénico, sino el vínculo, la conexión, la relación entre los espectadores y determinado espectáculo o puesta en escena.

Escrito por el creador escénico e investigador Rodolfo Obregón, reúne nueve crónicas, no de determinados montajes, sino de distintas situaciones o sucesos que permiten apreciar la teatralidad en la vida real.

No es un libro exclusivo para la gente de teatro; al contrario, está dirigido a un lector que no sea aficionado a ese arte, explica el autor. Pone de manifiesto esa profunda y a veces indistinguible relación entre el teatro y la vida, de la representación escénica y la cotidianidad de una persona.

Publicada por Ediciones El Milagro, la serie de crónicas se inicia con la segunda visita a México del reconocido director teatral Tadeuz Kantor (1915-1990), oportunidad que marcó a Obregón, pues trabajó de asistente del creador escénico polaco y determinó el principio de su carrera en el teatro.

Esa trayectoria fue marcada por el también director polaco, Ludwik Margules, éste radicado en el país. El relato tiene que ver con esa segunda visita y con una historia que me ocurrió en un teatro del Reino Unido, en las que hubo una serie de significativas coincidencias, comenta.

Anticipo de comportamientos

La segunda crónica gira en torno a una puesta en escena en el penal de alta seguridad de Almoloya de Juárez, cuando Juan Pablo de Tavira Noriega era el director de ese centro de reclusión, quien fue asesinado en noviembre de 2000.

“La obra que se escenificó en el penal tiene como título Conspiración”, recuerda Obregón. Lo que pasó en ese montaje, fue tan impactante, que ponía en juego justamente el carácter ambiguo de la representación teatral y la realidad. Esta crónica se entreteje con lo que pasó el día de la función con una nota periodística que apareció luego del asesinato de De Tavira Noriega.

La siguiente crónica aborda las repercusiones del montaje de la obra Los motivos del lobo, en CasaAzul. Las situaciones representadas en la obra detonaron otras circunstancias en la vida real de los actores que participaron en la puesta en escena.

La cuarta es un recorrido por el mundo del socialismo, a partir de una obra que se escenificó en Cuba durante el denominado periodo especial.

De igual manera, lo que sucedía en el escenario detonó una explosión emocional en la sala, que hacía de ésta un espectáculo mucho más atractivo que lo que pasaba arriba del escenario.

Sigue otra crónica, cuyos hechos también ocurrieron en Cuba: una actuación de la cantante y actriz Regina Orozco, en un cabaret. Presentación que igual motivó al público, como un reflejo de lo que ocurría socialmente en el mundo, luego de la desaparición de la Unión Soviética.

En Sin ensayar: crónicas de un mundo casi tan grande como el teatro se relata una situación en Río de Janeiro, en el centenario del natalicio de Bertolt Brecht, una crónica sobre el creador japones Yoshio Oida y otras ocurridas en El Cairo y la Rusia capitalista.

Para Rodolfo Obregón esas crónicas son ejemplo de “cómo el teatro anticipa o modela los comportamientos político-sociales personales, más allá de lo que estén viendo en el escenario. De ahí el título del libro: Sin ensayar”.