Con la luz de la mañana, Eugenia León revisó ayer sus mensajes telefónicos y uno le hizo el día, el mes, el año, en muchos sentidos: se le informó que en la próxima ceremonia de entrega del Grammy Latino se le rendirá homenaje por su trayectoria, por su carrera, por una vida dedicada al canto libre. Se lo dedico a mi generación, expresó en entrevista.

De muy buen humor comentó: “Sinceramente estaba yo medio dormida, porque estuve trabajando hasta las tres de la madrugada con algunas cosas que he estado grabando para el Facebook y me dormí tardísimo. Me desperté justamente con la noticia, por unos mensajes en el teléfono. Dije: ‘¡ah, caray!’, ¡qué bonito cumpleaños en mi carrera.

“Siento mucha gratitud con la Academia, porque yo nunca he dado chayote para nada, ni ando haciendo relaciones públicas para que me den absolutamente nada... ¡a lo mejor ese es mi error!, pero siempre he trabajado un poco, como dijo Fito Páez: ‘a la orilla del camino, haciendo lo que yo considero, lo que son mis inspiraciones, mis ideas, con una motivación muy importante: mi país. Me siento siempre comprometida con México, siempre preocupada por lo que nos pasa, buscando la manera de expresar mis sentimientos hacia mi país y, por supuesto, con el público que me ha seguido por todos estos años”.

Hay un sentimiento profundo, de esos que se traducen en una exhalación larga. Afirmó que con este premio a su persona se reconocen temas especiales: Creo que a las canciones que se vuelven himnos, que hablan de una colectividad. No tiene que ver el tema, porque puede ser que trata de dos personas. Si esa canción es empática con lo que sentimos en una comunidad se vuelve himno. Son los momentos de comunicación, de comunión con la gente de mi país, y con los oyentes de naciones donde he trabajado, porque la música es así de generosa, tan mágica. Crea una empatía inmediata con la gente cuando la haces con una verdad, con honestidad, con todo puesto en lo que cantas. Esa es mi motivación y me siento muy agradecida por el premio.

La entrega del premio especial se realizará el 17 de noviembre en Las Vegas, Nevada. “El protocolo de esos actos, de entrega de premios a la excelencia, no tiene que ver con lo que se va a televisar. Se transmite lo de los Grammy a los discos, a los intérpretes y a las producciones, pero un día antes hacen una actividad más privada con todos los reconocidos por su trayectoria, cosa que a mí me da mucho gusto porque siempre es lindo que a uno le premien un disco.

Es un esfuerzo y está muy bien, pero que me den un reconocimiento por los... ¡ya no sé cuántos años! ¡Ya olvidé cuántos años llevo trabajando... por todos estos años en los que he trabajado al margen de las consignas comerciales y de ser militante de algún partido. Mis aciertos o errores han sido míos y agradezco a la gente que me ha seguido y ha sido muy generosa al escucharme, entenderme, e identificarse con lo que hago o siento.

Es una trayectoria que se remonta a los años 70 con el Grupo Víctor Jara y Sanampay. Ahí descubrí que la música ne estaba cambiando la existencia. Ahí decidí ser cantante. Sanampay significó un paso por una necesidad más que nada económica, no tanto creativa, y cuando decidí ser Eugenia León, aparte de cualquier grupo, entonces volé. Ahí comencé un proyecto que sigue siendo muy personal, con mi relectura de la canción mexicana, con mi cariño hacia los compositores de mi generación, y libre de las consignas de que tienes que ser representante de algo.

Por el cambio social

Agregó: “No he hecho lo que otros y he buscado un camino un poco solitario porque no me disfrazo ni interpreto temas que sean convenientes para el folclor for export, sino realmente para hacer un trabajo personal, por amor a las canciones de América Latina que también me dieron una conciencia política. Obviamente los sucesos de México refrendaron que cantaba por una razón muy específica, por un cambio social en México y en América Latina, y en todos los países que han sufrido el subdesarrollo por el engordamiento de otros países. Desde que se convirtió en nación, a mi país le ha costado sangre. Ha sido mucho el dolor, la desilución, la corrupción. Sólo he dicho lo que siento. Todo para buscar un acuerdo común, un encuentro amoroso o respetuoso de nuestras diferencias. La desigualdad es una bofetada.

“La muerte de Juan Gabriel... siempre es triste que un artista se vaya, sobre todo uno que se volvió icónico en los pasados 30 años. La gente todavía lo sigue llorando. Es importante que el tiempo asiente las cosas, que el duelo se serene, y que no sea el pretexto para no ver las otras cosas que son graves y que suceden en México. Que un duelo muy justo para decir que ahora lo único que me queda es sentirme huérfano, que voy a seguir emborrachando y a olviarme de todo.

Muchas cosas no son nuestras, sino de los planes que se tienen desde hace muchos años. No podemos dejar de considerar la responsabilidad que a cada uno le toca de cuidar lo que somos. La fuerza ciudadana logra cosas. Este país ha sido heroico en resistencia, en no dejarse morir. Tenemos una historia que va a estar canijo que destruyan.

Dedicó este reconocimiento a la generación sandwich, con gente valiosa como Rafael Mendoza, Marcial Alejandro, David Haro y tantos otros.