Sociedad y Justicia
Ver día anteriorLunes 3 de octubre de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Con limpieza y sanitización efectivas se evitarían contagios en pacientes, asegura investigadora

Infecciones en hospitales cuestan al país $38 mil 500 millones al año

Apagadores de luz, conexiones, aire en zonas de internamiento, barandales, lugares más contaminados

Foto
La contaminación en hospital de Chiapas, que provocó la muerte de niños, o los decesos en la unidad de cuidados intensivos neonatales del Hospital de Sinaloa, se hubieran evitado con limpieza adecuada de las áreas, afirmó la ingeniera bioquímica industrial Gabriela León Guitiérrez. En la imagen, el Hospital General de CancúnFoto Notimex
 
Periódico La Jornada
Lunes 3 de octubre de 2016, p. 33

Las infecciones que los pacientes adquieren en los hospitales federales cuestan al país 38 mil 500 millones de pesos al año, gasto que se podría evitar con métodos efectivos de limpieza y sanitización, advierte Gabriela León Guitiérrez, ingeniera bioquímica industrial, quien diseñó productos con base en una nanobiomolécula capaz de entrar a los microorganismos y romper su material genético para evitar que se vuelva resistente.

Nbelyax es una mezcla de dióxido de titanio y extractos vegetales (cítricos), con patente en México y en trámite en otros 139 países, pues de esto no hay nada en el mundo. Cuenta con certificaciones del laboratorio de virología del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) que garantizan su eficacia para eliminar 99 por ciento o la totalidad de microorganismos (virus, bacterias y hongos) causantes de infecciones, incluidos los resistentes a los antibióticos, como la pseudomona aeruginosa, causante de neumonías graves y los virus de influenza.

Desarrollan productos

También ha realizado demostraciones en áreas de internamiento de hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social, el Hospital Civil de Guadalajara y un nosocomio en Torreón, Coahuila. Los virus, bacterias y otros patógenos desaparecen a los 30 minutos de haber limpiado o aplicado la sustancia, y su efecto dura 72 horas.

El producto ya cuenta con el registro sanitario de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris). León Rodríguez comentó que en el mercado existe una variedad de productos de limpieza, pero la mayoría contiene ingredientes cancerígenos y no son biodegradables. Puso de ejemplo el cloro, cuyo efecto de eliminación de bichos dura apenas unos minutos y tras desecharse puede tardar hasta cien años en biodegradarse.

Los productos Nbelyax son amigables con el medio ambiente y carecen de ingredientes dañinos. Incluso, afirmó la experta, tienen la capacidad de seleccionar y dirigirse exclusivamente a las células infecciosas sin tocar a las sanas.

Así es como actúan los productos, entre ellos de higiene personal, como jabón y crema antisépticos, que pueden remplazar al gel antibacterial hecho a base de alcohol. el cual sólo combate algunas bacterias, indicó.

También hay sanitizantes de uso directo (spray) y de superficies de alto nivel. Este último sustituye al cloro, el cual no cubre a todos los microorganismos y su efectividad dura apenas cinco minutos. Luego las áreas se contaminan otra vez, sostuvo León Gutiérrez.

El pasado mes de mayo, Nbelyax obtuvo la patente del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial y con el registro de Cofepris ya se puede vender en el país. Pero tiene el problema de provenir de una pequeña empresa que llega a un mercado donde predominan las grandes marcas que destinan recursos millonarios a publicidad.

En las instituciones de salud, el reto es que los directivos se convenzan de los beneficios que obtendrían con el uso de productos como Nbelyax, marca comercial Eviter. Comentó que a partir de los resultados demostrados en el Hospital de Pediatría del Centro Médico Siglo XXI del IMSS, los directivos plantearon la posibilidad de realizar más demostraciones en otras unidades.

León Rodríguez aseguró que casos como la contaminación en Chiapas, de jeringas que se usaron para vacunar a niños que luego murieron, o los decesos en la unidad de cuidados intensivos neonatales del Hospital de Sinaloa, no habrían ocurrido si existiera una adecuada limpieza de las áreas.

En sus investigaciones, la experta encontró que los lugares más contaminados son los apagadores de luz, las conexiones de gases y aire en las zonas de internamiento, así como los barandales de las cunas de bebés. Más información.