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Partidos aceptan el llamado; la formación de Uribe no acude a reunión con el presidente

Santos convoca a diálogo nacional en Colombia tras victoria del no

Timochenko dice que el acuerdo de paz puede renegociarse y asegura que sigue el cese del fuego

Rechaza el mandatario renuncia del jefe negociador del gobierno y lo envía a La Habana

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Juan Manuel Santos, presidente colombiano, se reunió ayer con el equipo negociador de la paz, dirigentes de partidos políticos y funcionarios del gabinete, ante quienes hizo un llamado a abrir un diálogo que permita la puesta en marcha de los acuerdos firmados con las FARCFoto Xinhua/Presidencia de Colombia
 
Periódico La Jornada
Martes 4 de octubre de 2016, p. 22

Bogotá.

Los partidos Social de Unidad Nacional, Liberal y Cambio Radical, que forman parte de la coalición centroderechista de gobierno en Colombia, así como el Partido Conservador, de la izquierda Unión Patriótica y de la independiente Alianza Verde, aceptaron este lunes el llamado del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, para abrir un diálogo que permita la implementación del acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), frenado de momento tras el rechazo en el plebiscito del domingo.

Timochenko, jefe máximo de las FARC, dijo que el acuerdo puede renegociarse, y se pronunció por incluir en la batalla por la paz a ese más de 60 por ciento de colombianos que no acudieron a las urnas.

El Centro Democrático, del ex presidente ultraderechista Álvaro Uribe, vinculado por organizaciones de derechos humanos a grupos de paramilitares, mandó un mensaje, pero no asistió a la reunión. Más tarde, nombró a su ex candidato presidencial Oscar Iván Zuluaga, así como a Iván Duque y Carlos Holmes Trujillo como delegados para dialogar con el gobierno sobre los acuerdos de paz con las FARC.

Santos se reunió este lunes en la presidencial Casa de Nariño con representantes de diversos partidos, líderes del Congreso y miembros de su equipo negociador en el proceso de paz con las FARC.

La invitación de Santos para abrir un diálogo nacional tras la derrota en el plebiscito estuvo dirigida principalmente al ultraderechista Centro Democrático, liderado por el ex presidente y ahora senador Álvaro Uribe (2002-2010), quien encabezó la campaña por el no al acuerdo de paz firmado hace una semana en Cartagena de Indias por Santos y Rodrigo Londoño Echeverri, también conocido como Timochenko.

Al final del encuentro, el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, comentó que los asistentes expresaron su respaldo a Santos para superar la crisis mediante el diálogo. Respaldamos la decisión de conformar una comisión amplia e incluyente que abra un diálogo nacional con todos los sectores, que tenga tiempos precisos y resultados concretos, declaró Lizcano.

Aunque Uribe respondió a la invitación de Santos señalando que quiere aportar a un gran pacto nacional por la paz, que corrija los errores del acuerdo entre el gobierno y las FARC, su formación no acudió al llamado a la Casa de Nariño.

Sin embargo, el Centro Democrático mandó un mensaje y reiteró que está dispuesto al diálogo y que sus representantes en esos contactos serán Zuluaga, Holmes Trujillo y Duque, perfilados por ese sector como precandidatos presidenciales para la campaña de 2018.

“Hoy deseamos insistir en que se escuchen nuestras razones. Así se lo pedimos, en nombre de los ciudadanos que votaron por el no, a la comunidad internacional, a nuestros compatriotas que votaron por el sí, a quienes se abstuvieron y al gobierno y sus negociadores”, expresó el centro uribista.

Enrique Santiago, abogado español que asesoró a las FARC en el proceso de negociación, atribuyó la derrota del a una campaña de desinformación brutal. En declaraciones a la cadena española Ser indicó que “no hubo debate… (sino) una batalla política entre Uribe y Santos”.

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El senador Álvaro Uribe ayer, durante una sesión en la cámara alta, en la cual se abordó el rechazo de la sociedad colombiana al pacto firmado con las FARC. El Centro Democrático, partido del ex gobernante, fue el gran impulsor del no en el plebiscito del domingoFoto Ap

Santiago criticó que se haya dicho que el acuerdo iba a traer el castro-chavismo, cuando lo que hace es defender la propiedad privada de los campesinos, o decir que se van a subir impuestos cuando se van a ahorrar siete u ocho millones de dólares diarios de gasto militar, hasta llegar a afirmar que se iba a imponer el imperio feminista y homosexual, porque en los acuerdos de paz hubo un mesa de género.

Desde La Habana, Timochenko señaló que el acuerdo puede renegociarse. Estamos analizando con calma los resultados para continuar, porque esto no significa que se ha perdido la batalla por la paz, declaró el líder de la insurgencia a W Radio.

Expuso que pese a que el no se impuso en las votaciones, las FARC proyectarán iniciativas para sacar adelante este proceso. Este resultado nos llena de más entusiasmo, nos compromete mucho más, porque de todas formas hay diversas lecturas y hay que analizarlas para ver en qué hay que rectificar, indicó.

Destacó que las FARC y el gobierno de Santos siguen comprometidos en el mismo objetivo de resolver un conflicto de 52 años que deja 220 mil muertos, 6.9 millones de desplazados y 45 mil desaparecidos.

Timochenko consideró que el plebiscito se vio influenciado por una polarización promovida casi de manera artificial, y aseveró que el resultado de la consulta no tiene efecto legal alguno.

Horas antes, anunció que las FARC mantendrán el cese del fuego definitivo, y en un video declaró: reafirmamos ante Colombia y el mundo que los frentes guerrilleros en todo el país permanecerán en cese del fuego bilateral y definitivo como una necesaria medida de alivio a las víctimas del conflicto y en respeto a lo acordado con el gobierno.

Santos y Timochenko suscribieron el acuerdo de paz hace ocho días en Cartagena de Indias y esperaban una victoria del para iniciar la implementación de los convenios que apuntan a que la guerrilla deje las armas y se convierta en partido político.

Pero 50.21 por ciento de los colombianos votaron en contra frente a 49.78 por ciento que lo hizo a favor del acuerdo, en un proceso que tuvo una abstención de 62 por ciento.

En ese contexto, el jefe del equipo negociador del gobierno con las FARC, Luis Humberto de la Calle, presentó su renuncia. Santos no la aceptó y lo envió a La Habana para que inicie conversaciones con los insurgentes.

Y el Ejército de Liberación Nacional, segundo grupo guerrillero de Colombia, informó que confía en dar buenas noticias al país en los próximos días sobre el inicio formal de negociaciones de paz con el gobierno, que buscan acabar un conflicto armado de más de medio siglo.