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El enfermero Juan Nicolás López documentó la atención a 45 heridos y seis ejecutados

Testigo de crímenes en Nochixtlán dice que estuvo preso por venganza del gobierno
Especial para La Jornada
Periódico La Jornada
Domingo 11 de diciembre de 2016, p. 22

Nochixtlán, Oax.

Juan Nicolás López, enfermero del Hospital Comunitario de esta ciudad, salvó la vida de 41 personas el pasado 19 de junio, pero en lugar de otorgarle la Medalla Belisario Domínguez, el estado lo encarceló durante dos meses porque documentó con imágenes y videos, la atención a 45 heridos de bala y seis civiles ejecutados extrajudicialmente por la Policía Federal, durante el desalojo a un bloqueo carretero en apoyo al magisterio.

El enfermero fue detenido el 15 de octubre por policías ministeriales que literalmente lo secuestraron llevándolo a lo alto del cerro, sin orden de aprehensión y bajo el cargo de resistencia a particulares en agravio a la sociedad, delito que no amerita prisión por no ser grave de acuerdo con el nuevo sistema de justicia penal acusatorio:

Fue una venganza del Estado. Los policías que asesinaron a seis personas andan libres, protegidos por el gobierno; mientras a testigos de esos crímenes como yo nos encarcelan, dice en entrevista con La Jornada.

Hace dos días fue liberado, luego de ser torturado sicológicamente y sufrir aislamiento en una celda de castigo y todo tipo de amenazas, en la cárcel número dos de Villa de Etla.

Por si fuera poco, a consecuencia de lo que considera la persecución del Estado, lo han suspendido de su trabajo sin goce de sueldo y sin el aguinaldo que por ley le corresponde.

Me siento muy impotente por no poder hacer nada, ni por las víctimas ni por mi, porque ellos deciden; el gobierno viola sus propias leyes y da lo mismo que uno sea inocente. Lamentablemente en el crimen de Estado de Nochixtlán como en tantos otros no habrá justicia, así lo ha decidido el gobierno.

Preso político

Juan Nicolás López acudió el pasado 7 de octubre como a las dos de la tarde, al juzgado mixto de primera instancia de Nochixtlán para atender un proceso familiar de convivencia por su hijo pequeño de seis años. La cita de carácter civil fue aprovechada por policías ministeriales de Oaxaca que con engaños lo subieron a una camioneta para llevarlo a un cerro y con violencia verbal secuestrarlo literalmente.

Ya te chingaste, no hagas nada, ahora estás detenido, le dijeron sin presentarle orden de detención ni leerle sus derechos o explicarle el supuesto delito que cometió para privarlo de la libertad.

Me bajaron entre el monte y me esposaron. Me dijeron que era orden del gobernador y que mejor le hablara a mi abogado. Me llevaron a una celda y a las 10 de la noche me dicen que mi abogado también había sido detenido y estaba bajo arresto.

Efectivamente, al acudir a su defensa, su abogado Roque Martínez también fue detenido por el mismo delito por orden de la juez Martha Santiago Sánchez, aunque la audiencia de ambos la desarrolló la juez Guillermina Ortega Domínguez.

Luego llegaron con una tarjeta informativa a la juez donde se ordenaba prisión preventiva y nos dan 70 horas para aportar pruebas a nuestro favor. Nos dejaron seis días en los separos incomunicados y luego nos vinculan a proceso sin fianza porque el delito que nos imputaban ameritaba 18 años de prisión y nos trasladaron a una celda de castigo 15 días en el reclusorio número 2 de Etla.

Cuenta que cuando ingresaron al reclusorio los desnudaron y les obligaron a hacer una hora de sentadillas y lagartijas: “Luego nos dieron un uniforme de color café apestoso, sucio. Yo pregunté por mi ropa y me dijeron: Aquí te callas con tu mirada agachada y tus manos hacia atrás. Aquí ya no son enfermero y licenciado, sólo internos sin ningún derecho. Y después se empezaron a burlar de nosotros, humillándonos, un preso allí no es persona, nos tratan como animales”.

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El enfermero Juan Nicolás LópezFoto La Jornada
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Heridos en Nochixtlán el pasado 19 de junioFoto La Jornada

Explica que días después los visitó la ex diputada Margarita García García, compañera del ex gobernador Gabino Cué: “Nos dijo que el abogado iba a salir libre, pero a mí me dijo: “Tú te vas a quedar preso porque diste declaraciones a La Jornada sobre los hechos ocurridos el día 19 de junio y dejaste mal al gobernador y está muy molesto contigo. Tú no vas a salir y ni te atrevas a pedir ayuda al ombudsman de la Comisión Estatal de Derechos Humanos”.

De esta forma, Juan Nicolás López no tiene duda de que se convirtió en un preso político porque en su trabajo de enfermero tuvo oportunidad de documentar la lista de los 45 heridos de bala que atendieron en el hospital comunitario.

Yo iba tomando fotos y videos a como iban muriendo las personas, dice de manera valiente. Me tocó estar ese día y solidariamente preparamos equipos, sueros, todo lo necesario para atender a los heridos de bala y lamentablemente se nos murieron cuatro.

Sabía que era inocente

De aquellos hechos, la Procuraduría General de la República ni siquiera ha abierto una averiguación previa de oficio, ni tampoco una investigación por los crímenes.

El gobierno tomó como pretexto mi proceso civil de convivencia con mi hijo por abuso de autoridad. Oficialmente nadie de la Procuraduría me ha llamado a declarar, mientras que solicitaron a todos los compañeros que no trabajaron ese día que fueran a declarar. Se nos hace raro que no nos llamen a declarar a quienes vivimos de cerca lo que le sucedió a 45 heridos ese día y además a los que fuimos testigos de cómo el helicóptero de la policía dejó caer encima del hospital gas lacrimógeno que empezó a penetrar por las rendijas.

Añadió: Sufrí condiciones muy difíciles de cárcel, mal alimentado y torturado sicológicamente. Pero a la vez, yo sabía que era inocente y estaba encarcelado injustamente y eso me hacía sentirme fuerte.

Como enfermero general titulado con 24 años de servicio, Juan Nicolás Lopez nunca olvidará lo que vivió ese 19 de junio: “Ese día murieron jóvenes y padres de familia. Recuerdo a Jesús Cadena Sánchez, quien llegó gritando: ‘No me quiero morir, no me quiero morir’ y al final empezó a caer en paro y se murió; tenía una bala expansiva en la vejiga y por sangrado interno se murió”.

Añadió: Fueron crímenes terribles. Los asesinos que los mataron andan libres. Por un homicidio como esos son 40 años de prisión. ¿Dónde están ellos? Quien se atreve a decir la verdad lo encarcelan injustamente como a mí. El gobierno quiere que el pueblo esté callado y oprimido como siempre, y por eso persigue a personas que no se callan, por eso genera miedo y terror para que la gente no salga a las calles a defender sus derechos.

Juan Nicolás López tiene libertad condicional con tres restricciones importantes: la primera, no participar en ninguna manifestación y acto de protesta contra el gobierno; la segunda no salir del estado de Oaxaca y la última: firmar cada 15 días su libertad condicional.

Es otra venganza. El Estado me metió a la cárcel ilegalmente y estoy exigiendo volver a mi trabajo. Solicité una licencia por estar preso del primero de noviembre al 31 de diciembre. Y hoy quise regresar pero no aceptaron. Por eso exijo la reparación del daño para que se me reintegren mi quincena y me den mi aguinaldo.