Durante las vacaciones de invierno 2016, que concluyeron el pasado fin de semana, usuarios del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) se quejaron por la desorganización, demoras en operaciones y saturación en tiempos de espera para recoger equipaje, principalmente en aerolíneas de bajo costo. Pero no sólo esto, también dijeron que sus maletas sufrieron maltrato.

En las terminales 1 y 2 concurren alrededor de 250 mil personas entre viajeros y visitantes, en las que trabajan más de 25 mil empleados de diferentes instituciones y empresas. En el periodo de asueto de fin de año, por el aeropuerto capitalino se desplazaron más de 2 millones 686 mil 800 pasajeros. En los días con mayor demanda atendió entre 130 y 146 mil usuarios por día. Los horarios con mayor saturación son de las 6 a las 9:59 horas y de las 16 a las 19:59.

De acuerdo con el Buró Comercial de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), el año pasado recibió 590 quejas contra Vivaerobús, de las cuales 77 por ciento fueron conciliadas; contra Volaris, 300, y 83 por ciento fueron resueltas del mismo modo.

Los principales vuelos con problemas durante esos días fueron a Cancún, Monterrey, Guadalajara, Chiapas, entre otros. Incluso hubo despegues nacionales que estaban programados a las 9 de la mañana, pero lo hicieron después de las 18 horas. Lo mismo ocurrió en traslados internacionales que se retrasaron hasta un día.

Los aterrizajes también resultaron afectados. Algunos turistas reiteraron que las empresas culpan a la saturación aérea o las afectaciones climatológicas. Todos estos problemas provocaron aglomeraciones de más de una hora en el área de entrega y revisión de maletas.

Las querellas que atendió Profeco en sus módulos instalados en ambas terminales se debieron a retrasos y cancelación de vuelos, así como negativa a la devolución del depósito, el producto o el servicio.