Sociedad y Justicia
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Ese año puso en marcha el programa Escuela Segura a escala nacional

Desde 2008 la SEP ha buscado prevenir la violencia en planteles

Las recomendaciones para evitar el uso de armas en los colegios fueron emitidas en 2012

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Aplicación del operativo Mochila segura en la secundaria 45 María Enriqueta Camarillo, en la colonia Narvarte de la Ciudad de MéxicoFoto María Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Domingo 22 de enero de 2017, p. 30

Ante el contexto de inseguridad que enfrenta México, la Secretaría de Educación Pública (SEP) emitió, hace casi una década, manuales, recomendaciones y protocolos para prevenir la violencia dentro y fuera de las escuelas.

En ellos exhorta a preparar a las comunidades escolares para enfrentar extorsiones, amenazas, riesgos de bomba, ataques directos al plantel y balaceras, y hasta definir normas para explicar a los alumnos el hallazgo de personas asesinadas en las inmediaciones de los centros escolares.

Sólo como parte del programa Escuela Segura, que se puso en marcha a escala nacional en 2008, la SEP, en coordinación con las autoridades educativas estatales, elaboró el Manual de seguridad escolar, con recomendaciones para protegernos de la inseguridad y la violencia.

En el texto, emitido en 2012, se señala que para prevenir la presencia de armas en las escuelas se debe recomendar a las familias no tenerlas en casa o al menos no al alcance de sus hijos.

Añade que los alumnos llevan un arma a la escuela porque, entre otras razones, la “tomaron a escondidas de sus padres, la llevaron para impresionar o intimidar a algún compañero, la recibieron de un adulto para dársela a otro, la encontraron y la llevan para mostrarla, la portan para defenderse de una situación de acoso escolar o bullying o la llevan para intimidar al maestro”.

La SEP reconoce que no sólo los estudiantes pueden llevar estos objetos al plantel, sino también los adultos, a fin de intimidar, impresionar o defenderse. Si bien recomienda que ante el riesgo de que armas blancas o de fuego lleguen a las escuelas deben colocarse controles, destaca que si un alumno porta armas, ya sea que amenace o no con ellas, en primera instancia la responsabilidad es de los padres.

En cuanto a la directiva de la escuela, afirma que su responsabilidad es proteger la integridad de todos los alumnos, incluso de quien porta el arma, no de juzgar. Eso corresponde a las autoridades, por lo que entre otras recomendaciones propone no tratarlo como delincuente ni exponerlo ante sus compañeros y familias.

En las acciones sugeridas para los consejos escolares de participación social, en su apartado de seguridad escolar, la SEP pide gestionar que personal especializado capacite a la comunidad escolar para evitar situaciones de riesgo, registrar a toda persona ajena al plantel en un libro de visitas y tener dispositivo de seguridad en los accesos.

En cuanto a las autoridades estatales, desde 2004 diversas entidades han emitido leyes de seguridad escolar, cuyo objetivo es detectar conductas de riesgo para la comunidad de alumnos y docentes como el consumo y venta de droga y entornos inseguros, así como detectar armas o agresiones en los planteles.

En varios estados, como Chiahuahua, Tamaulipas y Sonora, se propone la creación de brigadas escolares o grupos de docentes y padres de familia que participen en la vigilancia de los entornos de las escuelas, pero también que asuman funciones de revisión y control dentro de los planteles.