Opinión
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Dinero

Si no conviene, México dejaría el TLC

Esteban Moctezuma se incorpora a Morena

El embajador y los mil millones de Josefina

Astillero

Ayuda al PRI en Edomex

PAN y PRD van por separado

Vázquez Mota, carta de EPN

Alfonso Romo y AMLO, de nuevo

Enrique Galván Ochoa
Julio Hernández López
Bajo la lupa

Trump sepultó el cadáver del ATP

México SA

TLCAN: se acabó la fiesta

México no se va; lo corren

¿Dónde quedó el amigo?

Alfredo Jalife-Rahme
Carlos Fernández-Vega
“Grave patrón de violencia” contra defensores de DH
T

ras una visita de nueve días a México, durante los cuales se reunió con más de 800 defensores de derechos humanos de 24 estados, el relator especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre la situación de los defensores de derechos humanos, Michel Forst, advirtió que en nuestro país existe un grave patrón de violencia contra esos activistas, quienes enfrentan una tendencia de muerte procedente de cuerpos policiales de todos los niveles, las fuerzas armadas, empresas y particulares.

El Correo Ilustrado

¡Por un verdadero bosque en Chapultepec!

L

eí con atención el artículo de José María Muriá sobre el Bosque de Chapultepec y el peligro de volver a entregar parte de la tercera sección a manos privadas, con usos recreativo y cultural. A él añado mi lectura, en este diario, de dos artículos previos de Iván Restrepo, que denuncian la amenaza y los graves costos de privatizar el parque y más a manos de Grupo Azteca.

El proyecto de muerte digna en la CDMX
E

n México, según el Inegi, para 2030 habrá más de 20 millones de habitantes con más de 60 años. Los avances han posibilitado alargar el ciclo de la vida humana. Hoy día la mayoría de los mexicanos vivimos en zonas urbanas, con la mejora de las condiciones de vida y los avances médicos, la esperanza de vida se ha alargado considerablemente. Somos una población que tiende a envejecer. No sólo el sentido de la vida ha cambiado, sino también el sentido de la muerte. La muerte se ha convertido en un nuevo espacio de debate que involucra el miedo, el sufrimiento y las agonías largas y dolorosas que degradan la condición humana. ¿El bien morir significaría una muerte civilizada? En la tradición judeocristiana sólo Dios tiene la potestad de otorgar y quitar la vida en el momento adecuado. La eutanasia está fuera del lenguaje cristiano desde hace más de 2 mil años. Sólo Francisco de Asís optó por congeniar con la muerte, llamándola la hermana muerte y sugiriendo que detrás de su rostro sombrío había un semblante precioso y brillante, el hecho de la resurrección.

Respaldo interno
E

l depositario de las furias, los temores y los rechazos de amplias capas de estadunidenses y la casi totalidad de los mexicanos se ha instalado en la Casa Blanca. Ya no es aquella suerte de imagen difusa de un ser ofensor de dignidades y deformador de realidades, sino el individuo que tiene potestades legales de gran alcance y envergadura. Un aprendiz de presidente de la república que puede hacer mucho daño, bastante más del que ya ha infligido a numerosas entidades nacionales y a otros pueblos del mundo. El señor Donald Trump habita una casa que también cobija a diversos personajes concentradores de buena parte del poder decisorio de Estados Unidos. La todavía indiscutida potencia hegemónica del mundo tiene ahora caprichosos dirigentes. Una colindancia que obliga, quiéranlo o no, a convivir aunque sea a tirones constantes, desprecios mutuos, envidias cotidianas, imitaciones arraigadas y deseos de venganzas. Una relación altamente integrada y desigual que no puede ser definida por variables simples sino por factores de nutrida complejidad.

Bernardo Barranco V.
Luis Linares Zapata
Trump y los estertores de la política
E

n el decenio de 1920 algunos escritores, artistas y periodistas empezaron a imaginar sociedades con características negativas, que escasa atención causaban entre los científicos sociales comprometidos con las nociones aceptadas de progreso y modernidad.

La marcha en Washington
N

o regresé de México a Nueva York a tiempo para acudir a la marcha del sábado. Seguí, como tantos, las crónicas y fotos de la prensa y, por fortuna, los movimientos en contra del nuevo presidente-con-vocación-de-dictador han comenzado estruendosamente. Anoche me llegó una carta de unos buenos amigos, los antropólogos Jane y Peter Schneider, contando su experiencia en la marcha en Washington. Mi hija, por su parte, acudió, emocionada, a la de Los Ángeles. Y tantos otros amigos marcharon en Chicago o Nueva York, San Francisco y Los Ángeles. Vale la pena observar y tomar nota de esas movilizaciones, ya que marcan el inicio de la resistencia contra las políticas impositivas que no han dejado de fluir de la pluma ni de la boca de Donald Trump desde que asumió la presidencia. Vale la pena, también, porque los mexicanos también tendrán que irse movilizando, contra el muro, en primer lugar, y contra la idea de que los mexicanos han robado empleos a los estadunidenses (olvidando que la fórmula del libre comercio fue promovida en primer lugar desde Washington).

José Steinsleger/ I
Claudio Lomnitz
El legado de Trump
E

l discurso de toma de posesión de Trump retomó el mensaje medular de toda su campaña. Hay muchas cosas que andan mal en Estados Unidos, comenzando con la corrupción de los políticos en Washington. Es el mismo mensaje que fue retomado por los millones que votaron por él y que han padecido el deterioro de su nivel de vida en los pasados 20 años. Pero los nombramientos que hizo Trump para su gabinete muestran que no está preocupado por ese sufrimiento de millones de estadunidenses.

El sol de Carlos Pellicer
S

e ha escrito mucho sobre el espíritu universal del grupo Contemporáneos. Lo tuvieron, es cierto, pero no fueron los únicos: otros grupos muy distantes y distintos a su estética, como el grupo de los Estridentistas, también abrieron sus ventanas para alimentarse con otras atmósferas.

Alejandro Nadal
Javier Aranda Luna