Pekín.

El gobierno de China advirtió este martes a Estados Unidos que no desistirá de sus reivindicaciones de soberanía en el disputado mar de China meridional, un día después de que la administración de Donald Trump se comprometió a defender los territorios internacionales en la estratégica zona.

La soberanía sobre las islas del mar de China meridional y sus aguas adyacentes es indiscutible, declaró en conferencia de prensa Hua Chunying, portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, quien subrayó que Estados Unidos no forma parte de la disputa.

China reclama casi todo el Mar de China meridional, mientras Taiwán, Malasia, Vietnam, Filipinas y Brunei hacen lo propio con áreas que controlan rutas marítimas estratégicas y tienen ricos caladeros pesqueros, además de reservas de petróleo y gas. Las islas artificiales de China en esas aguas, algunas de las cuales podrían tener uso militar, son consideradas potencial detonante de un conflicto.

Estados Unidos va a asegurarse de proteger nuestros intereses allí, dijo el lunes Sean Spice, nuevo portavoz de la Casa Blanca, cuando se le preguntó si Trump concuerda con los comentarios del nominado a secretario de Estado, Rex Tillerson, quien el 11 de enero dijo que no se debe permitir el acceso de Pekín a las islas que construyó en el Mar de China meridional.

Para Hua, la soberanía de Pekín sobre las islas Spratly en el Mar de China meridional es irrefutable, y precisó que China también está comprometida con la protección de la libertad de navegación y quiere conversar con las naciones directamente implicadas para hallar una solución pacífica.