Un batallón de alrededor de 500 elementos del Ejército Mexicano arribó a Colima con la finalidad de reforzar la seguridad en ese estado, actualmente uno de los más violentos del país.

En rueda de prensa, el secretario de Gobierno, Arnoldo Ochoa González, informó que los efectivos castrenses llegaron desde la noche del martes y serán desplegados principalmente en la ciudad de Tecomán.

El comandante de la vigésima zona militar, con sede en la ciudad de Colima, Celestino Ávila Astudillo, detalló que el batallón atenderá otras demarcaciones, en caso de que sea necesario, coordinado con autoridades municipales y estatales.

Los soldados realizarán recorridos, revisiones e instalarán puntos de supervisión con el objetivo de abatir los altos índices de violencia y criminalidad, sobre todo los homicidios dolosos.

La mayoría de los asesinatos se cometen en Manzanillo, los municipios de Tecomán, Armería y la capital del estado.

El año pasado Colima cerró con 607 homicidios dolosos, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, y se convirtió en la entidad con mayor número de este tipo de delitos a escala nacional por cada 100 mil habitantes.

En este contexto, el secretario de Seguridad Pública, Francisco Castaño Suárez, compareció ante los diputados del Congreso y se le preguntó sobre la violencia que afecta a la entidad, antaño una de las más seguras y tranquilas de México.

Reconoció que enero de este año fue el más violento de que se tenga registro, con 78 asesinatos, a raíz del “pleito entre los cárteles de la droga, principalmente entre el del Pacífico y el de Jalisco Nueva generación”.

El funcionario detalló que el aumento en los índices de homicidios dolosos se debe a una serie de traiciones entre miembros de esas bandas delictivas.

En tanto, la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz tomó el control de la seguridad en el municipio de Ciudad Mendoza, mientras los 25 elementos que conformaban la policía local fueron trasladados a la academia de policía de El Lencero, en Xalapa.

Desde primera hora de ayer, elementos de Ejército, Marina, Policía Federal y Fuerza Civil llegaron a la comandancia, donde retuvieron a los agentes y se los llevaron para aplicarles exámenes de control y confianza.