Ninguna persona que acuda a la explanada del Zócalo para celebrar el Día de la Candelaria podía quedarse sin comer tamales y tomar atole, ordenó el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa, vía telefónica, a su secretario de Desarrollo Social, José Ramón Amieva Gálvez, quien para cumplir optó por pasar la charola entre los funcionarios con la meta de juntar alrededor de 100 mil pesos para pagar 10 mil piezas.

Al inaugurar el primer Festival del Tamal CDMX, el funcionario refirió ante las personas congregadas frente al templete, instalado en la explanada de la Plaza de la Constitución, que para cumplir con el encargo Mancera Espinosa le propuso platicar con todos los compañeros, porque sabía que eran gente muy generosa, “y a ver cómo le hacen.

La verdad recurrimos al sistema de la cooperación voluntaria; ahorita por aquí se pasaron unas cajas, cada quien dimos lo que teníamos, confesó Amieva Gálvez.

Luego, el funcionario anunció que todos los tamales y el atole, que se vendían a 10 pesos en las carpas instaladas por 50 comedores comunitarios, serían gratuitos.

Precisó que además, por cuenta del jefe de Gobierno, quien sacó muñequito en la rosca de Reyes, se distribuirían 10 mil tamales y atole de manera gratuita a todos los que se encontraban ahí.

De tal manera que el gobierno capitalino cumplía con una tradición sin utilizar recursos públicos, puntualizó.

El secretario aprovechó el foro para hablar de las bondades de la carta magna de la Ciudad de México y presentar a Porfirio Muñoz Ledo como un padre de ley de la constitución, así como del tema alimentario y de cómo el alza en la gasolina, el petróleo y el dólar impacta en el poder adquisitivo de los ciudadanos.

Una mujer posa ante un Niño Dios gigante en la Catedral MetropolitanaFoto Jair Cabrera

Pero el mensaje empezó a resultar extenso para algunos de los asistentes, que llegaron poco antes de las 8 horas y ya pasaban de las 11, haciendo evidente su impaciencia.

... Siempre ganarán los tamales

Por lo que al hacer uso de la palabra, Muñoz Ledo ofreció: seré breve, porque en la lucha entre los discursos y los tamales, siempre ganarán los tamales.

En menos de siete minutos el comisionado de la reforma política resumió la importancia que tiene para la Ciudad de México contar con la primera constitución, la cual, dijo, dará más instrumentos al gobierno para seguir sirviendo, y a los ciudadanos derechos que serán exigibles en materia de salud, educación, agua y vida reproductiva, entre otros, no sólo programas sociales.

Detalló que en la discusión en la Asamblea Constituyente hubo partidos que no estuvieron de acuerdo con propuestas de avanzada como el voto a los 16 años o la renta básica universal; sin embargo, confió en que lo que no se logró aquí se logrará mañana.

Y aún más breve fue la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, quien se limitó a declarar inagurado el festival e invitar a la gente a degustar de los tamales y el atole.