El ánimo del América se elevó del suelo al cielo tras la victoria del sábado sobre Cruz Azul. El equipo entrenó ayer en sus instalaciones de Coapa, donde se permitió el acceso a decenas de aficionados de una empresa privada y a un grupo de niños del Teletón, quienes aclamaban a gritos a dos de sus consentidos: ¡Oribe, Oribe...! y ¡Arroyo, Arroyo!

Los jugadores que fueron titulares ante la Máquina hicieron trabajo de recuperación entre risas y bromas, ya sin la presión que los agobió la semana anterior. En tanto, los que afrontan la Copa Mx imprimieron intensidad a la práctica dirigida por el técnico Ricardo La Volpe, con miras al choque del miércoles ante Santos Laguna.

El paraguayo Cecilio Domínguez, quien comenzó el torneo en plan de goleador, pero se perdió los clásicos ante Chivas y Cruz Azul por una luxación en el hombro izquierdo, hizo trabajo aparte en el gimnasio del club. Ha mejorado mucho y existen grandes posibilidades de que vuelva a la actividad cerca de la fecha 10, cuando se enfrenten al Necaxa, confió una fuente interna.

El zaguero Paul Aguilar, a su vez, sigue en rehabilitación, pero quien regresa a la actividad es el también guaraní Miguel Samudio, expulsado frente al Rebaño y quien ya cumplió su partido de castigo, por lo que irá a Torreón para retomar ritmo.

Samudio, en entrevista radiofónica, dijo que el equipo jamás ha perdido confianza. La derrota contra Chivas fue un golpe duro, pero pronto le dimos vuelta, nos concentramos en el siguiente partido y el triunfo del sábado fue importante... Sabemos que lo único que debemos hacer es trabajar sin hacer caso a las críticas, comentó.

El grupo está creciendo, aunque faltan muchos detalles, pero estamos a cuatro o cinco puntos de los líderes; entonces hay tranquilidad, expuso.

Ante los Guerreros, el América incluirá elementos de la Sub-20. La meta es cerrar la fase inicial en el primer lugar del grupo tres, para después instalarse en octavos de final de la Copa Mx.