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Los de Abajo

Etiquetas y culturas

¿C

ómo se convierte en etiqueta de cerveza un ritual sagrado indígena? ¿Quién otorga el permiso? ¿Quién lo impide? ¿Cómo se revierte? ¿Quién y cuándo tiene que pedir perdón por un acto de abuso y profanación? Estas y muchas preguntas tendrá que responder el Instituto Nacional de Antropología e Historia, dependencia a la que el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación recomendó a los voladores de Papantla dirigir su denuncia.

El ritual de los voladores de Papanltla es una danza asociada a la fertilidad que es patrimonio de la humanidad desde 2009, y se ejecuta principalmente en Veracruz. Esta ceremonia, advierte Narciso Hernández Jiménez, presidente del Consejo para la Protección y Preservación de la Ceremonia Ritual de Voladores, está siendo profanada por la cerveza Indio, perteneciente a la empresa Cuauhtémoc-Moctezuma, la cual lanzó el 2 de mayo de 2016 una convocatoria para el concurso de diseño de etiquetas con el supuesto objetivo de celebrar a los barrios de México. Una de las etiquetas está dedicada a Papantla, Veracruz, ignorando que Papantla no es el nombre de un barrio, sino de un municipio y de su cabecera.

La imagen de la etiqueta muestra al personaje de la cerveza Indio disfrazado de volador, aludiendo a nuestra expresión cultural de manera irresponsable al no habernos solicitado ningún tipo de anuencia como portadores y practicantes de la ceremonia ritual, advierte el consejo en un comunicado.

En tiempos en los que parece que todo es mercancía, los pueblos totonacos se defienden, como en su momento lo hicieron las mujeres mixes de Tlahuitoltepec, ante el plagio de su vestimenta realizado por una diseñadora francesa. El INAH recomienda a los voladores de Papantla registrar su ceremonia, lo cual no garantiza la no venta de su patrominio. ¿Por qué es tan difícil entender que las expresiones culturales no están en venta?

Los grupos de voladores acusan a la cervecera de daño moral a su cultura, pues, señalan, nos ridiculiza, ofende y discrimina, toda vez que dicha campaña publicitaria asocia la ingesta de alcohol con quienes practicamos la ceremonia de los voladores, situación que no puede pasarse por alto.

La exigencia debe ser atendida de inmediato: La cervecera Cuauhtémoc-Moctezuma debe retirar la etiqueta con la imagen de los voladores de todo el producto y la propaganda asociada a la campaña. Además, está obligada a pedir una disculpa pública por el daño ocasionado a los practicantes.

No es menor además la exigencia de una indemnización por daño moral y cultural y por el lucro de la imagen. Hoy es por la cultura totonaca. Mañana por alguno de las más de 60 pueblos, naciones, tribus y barrios de México. No más.