Caracas.

Miles de opositores bloquearon importantes vías de comunicación este lunes en medio de brotes de violencia, al comenzar la séptima semana de protestas en Venezuela para exigir la salida del presidente Nicolás Maduro.

Los detractores se apostaron por la tarde en la neurálgica autopista Francisco Fajardo y encapuchados colocaron barricadas en varios puntos. Las fuerzas de seguridad lanzaron gas lacrimógeno.

En el plantón algunos jugaron cartas, cantaron, tocaron guitarra o leyeron sentados en sillas de playa o acostados en colchonetas. A ratos gritaban: ¡libertad!

El gran plantón contra la dictadura derivó en algunos disturbios en los estados de Carabobo, Nueva Esparta (isla Margarita), Zulia, Aragua, Mérida y Táchira. Según reportes de prensa y dirigentes opositores, hubo varios detenidos, entre ellos la diputada suplente Janet Fermín, en Nueva Esparta. La protesta duró aproximadamente 12 horas.

Maduro enfrenta manifestaciones desde el pasado primero de abril, con saldo de 38 muertos y cientos de heridos y detenidos, de los cuales un centenar, según organizaciones de derechos humanos, son procesados en tribunales militares.

El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (Venezuela comenzó su retiro del organismo hemisférico hace dos semanas), convocó a una reunión de cancilleres para el 31 de mayo, a fin de analizar la crisis venezolana, al tiempo que la Unión Europea apremió a alcanzar una solución pacífica y llamó a todas las partes a abstenerse de cometer actos violentos.

El gobierno de Maduro acusa a Estados Unidos, la OEA y países de la Unión Europea de apoyar los actos vandálicos en las protestas.