En la actualidad, todavía mencionar la palabra cáncer espanta y creemos que con pronunciarla podemos enfermar o si no la decimos la alejamos de nuestras vidas; sin embargo, estar familiarizado con este padecimiento es de relevancia para prevenirlo y detectarlo a tiempo, señaló José Carlos Gutiérrez Niño, director de Desarrollo Institucional de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC).

En la presentación del cortometraje Cuento de hadas, realizado por egresados de la Universidad del Valle de México, resaltó la importancia de la sensibilización sobre el cáncer infantil, que sigue siendo una de las primeras causas de muerte por enfermedad en menores de edad, con mayor incidencia entre los cinco y 14 años.

Refirió que este padecimiento es un problema de salud pública porque todavía a tres de cada cuatro niños se les diagnostica de forma tardía. Significa que la probabilidad de recuperarse al inicio es muy baja y entonces todo lo que podamos hacer no se aprovecha completamente.

En entrevista, Gutiérrez Niño subrayó la poca cultura de prevención y atención médica que llevaría a un diagnóstico oportuno y disminuiría los niveles de mortalidad en menores por esta enfermedad.

Por ello, recordó a los padres estar atentos a signos o síntomas que pueden significar un riesgo de cáncer, como la pérdida de peso, palidez y fatiga, y si éstos se asocian con temperaturas sin fiebre, moretones sin golpes, vómitos, dolor de huesos y articulaciones se requiere acudir de inmediato con un especialista, pues con un tratamiento a tiempo el cáncer infantil es curable.

Leucemia, linfoma, tumores de sistema nervioso central son algunos de los padecimientos más frecuentes en los menores. A partir de los 10 años hay más cáncer en huesos, de acuerdo con información de la AMANC.

Al acto asistieron la fundadora y presidenta de dicha asociación, María de Guadalupe Alejandre Castillo; el presidente de la Junta de Asistencia Privada de la Ciudad de México, Carlos Madrid Varela, así como los productores del cortometraje, Guadalupe Rincón y Juan Cerda.