El partido Morena en la Asamblea Legislativa (ALDF) interpuso ayer ante la Suprema Corte de Justicia de la Nacional (SCJN) cuatro acciones de inconstitucionalidad contra la nueva legislación electoral de la Ciudad de la México.

El coordinador de la fracción, César Cravioto Romero, informó que las inconformidades tienen que ver con las disposiciones que impiden que un partido tenga más de 33 diputados en el Congreso, con lo que se evita que haya mayoría en ese órgano.

Asimismo, impugnaron el retiro de un plumazo del concepto de violencia de género como delito electoral, con lo que se impide que unos comicios sean anulados por violencia política hacia la mujer; así como la conformación de las alcaldías, que garantiza a su titular tener el control de la demarcación.

La cuarta acción de inconstitucionalidad, agregó, tiene que ver con que no se consultó a los pueblos indígenas y barrios originarios de la ciudad, ni se les da representación tanto en el Congreso como en las alcaldías en dicha legislación, que incluye el Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, así como las leyes Procesal Electoral y de Participación Ciudadana de la Ciudad de México.

Acompañado de diputados locales y constituyentes, además del presidente local de Morena, Martí Batres Guadarrama, el líder de la bancada de ese partido afirmó que la legislación electoral aprobada recientemente viola la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y especialmente la Carta Magna de la Ciudad de México.

Entrevistado luego de entregar las acciones de inconstitucionalidad en la SCJN, Cravioto Romero resaltó el apoyo de cinco diputados de otros partidos que acompañan dicha acción: dos del Revolucionario Institucional, uno de Encuentro Social, otro de Movimiento Ciudadano, y en el caso de la última, a esos cuatro se sumó un legislador del Partido de la Revolución Democrática, aunque no dio a conocer sus nombres.

Martí Batres manifestó que con las leyes electorales aprobadas se mutilan derechos y se revierten avances que se tuvieron en la Asamblea Constituyente. Afirmó que los candados que se pusieron al Congreso local van con dedicatoria a Morena para que no pueda tener mayoría en ese órgano.

Pero, agregó, se otorga una mayoría automática a los alcaldes, con lo que simplemente se busca un interés político en el sentido de que una fuerza minoritaria pueda tener el control total de las alcaldías que gane.

Para la legisladora Aleida Alavez, se trata de imponer “reglas ad hoc para que hagan una mayoría ficticia, como la que ha existido en la Asamblea Legislativa, así como en la ciudad, ahora con la alianza que se está prefigurando entre los partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional”.