Ante las críticas que ha suscitado el nuevo sistema de justicia penal acusatorio, las bancadas del PRI en ambas cámaras preparan un proyecto de modificación en el que trabajan desde hace cuatro meses con expertos en la materia y funcionarios de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) y de la Procuraduría General de la República (PGR), entre otros.

En este mismo sentido se manifestó el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cossío Díaz.

Dijo que frente a la crisis de confianza y falta de efectividad del nuevo sistema se debe realizar un diagnóstico serio en el que cada uno de los actores involucrados (poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial) analicen honestamente y con autocrítica qué dejaron de hacer y qué errores cometieron para que estemos en una grave situación en la que está en riesgo la seguridad del país y el patrimonio de las familias mexicanas.

Incluso, convocó a un ‘‘pacto de Estado’’ en el que los tres poderes de la Unión, los gobernadores y congresos locales asuman su responsabilidad para reconocer qué hicieron bien y qué les falta por hacer para que el sistema oral cumpla con las expectativas.

De lo contrario, aseveró, seguiremos en esta dinámica de echarnos la culpa unos a otros y que esto siga deteriorándose.

Entrevistado ayer en sus oficinas del máximo tribunal del país, Cossío descalificó las propuestas de diversos actores políticos de incrementar las penas para ciertos delitos –como la portación de armas de fuego– o aumentar el catálogo de ilícitos graves para que los presuntos culpables sean juzgados en prisión preventiva.

Hacerlo, dijo, nos regresaría al sistema penal que teníamos antes de la reforma de 2011, el cual fue duramente criticado por no respetar el debido proceso y llenar las cárceles de inocentes.

La priísta Cristina Díaz, presidenta de la Comisión de Gobernación del Senado, detalló que ya se revisan cerca de 40 artículos de las diferentes leyes y códigos que integran ese sistema penal oral, con miras a perfeccionarlas. ‘‘En realidad no son muchos artículos –los que deberán modificarse– si se considera que son muchas leyes las que integran el nuevo sistema penal’’.

Insistió en que se trabaja en una miscelánea penal que propone unificar la legislación y hacerla concordante con el sistema de procuración y administración de justicia, y se exponen propuestas de homologación de criterios, de modo que se eviten contradicciones.