Opinión
Ver día anteriorJueves 13 de julio de 2017Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Ciudad Perdida

Reducción de estacionamientos

Desarrolladores beneficiados

¿Golpe a la industria automotriz o balazo al pie?

U

na nueva medida ¿en contra? del uso del automóvil se verá en la capital del país. El anuncio dice que quienes construyan ya no tendrán que crear, también, cajones de estacionamiento, lo que se asegura irá en favor, entre otros aspectos, del medio ambiente.

Nadie puede dudar de que en el gobierno de Miguel Ángel Mancera se han impulsado, como prioridad, medidas que se podrían calificar de contrarias al uso del automóvil, y esta última, más que ir en ese sentido podríamos asegurar que será en beneficio de los constructores.

Entonces, no habrá más lugares de estacionamiento, pero seguramente esos espacios los utilizará el desarrollador para construir más oficinas, que venderá más caras; tendrá que invertir más, pero sus ganancias habrán de aumentar de igual manera, así que este viento parece soplar en favor de quienes edifican y no tanto del medio ambiente. Déjeme explicarle.

Hoy por hoy la industria automotriz en México es la tercera o cuarta generadora de empleos. Basta recordar que las amenazas de Donald Trump hacia las firmas de ese sector en México pusieron en riesgo, según se expuso en el momento, un millón cien mil empleos. De ese tamaño es esa industria, que hasta antes de la advertencia con la que se pretendía dañar a México se dijo que seguiría creciendo en estos años.

Sin embargo, parece que alguien perdió la brújula. En la Ciudad de México, que es donde más se compran automóviles, no habrá lugar para estacionarlos, pero eso no preocupa a los fabricantes, cuando menos por el momento, y esto porque este año, de enero a junio, la fabricación de vehículos en el país aumentó 2.9 por ciento respecto del mismo periodo del año anterior, y aunque muchos se exportaron una muy buena cantidad se quedó en el país para su comercialización.

La revista Expansión, especializada en este tipo de indicadores, asegura que sólo en enero las ventas de la industria crecieron 3 por ciento. Es decir, en ese mes se vendieron 123 mil 260 unidades, algo así como 4 mil por día, contando los 31 días del mes.

Si todos estos datos son verdaderos, y si por el momento no tenemos en toda la industria nacional alguna rama que pueda sustituir a la automotriz, nos estamos dando un tiro en el pie, porque esa significa 16.9 por ciento de las manufacturas en el país, y más de 3 por ciento del producto interno bruto nacional.

Es verdad, cada día es más difícil desplazarse en automóvil; las horas pico se han convertido en días pico, pero si se quiere desalentar su uso, por ejemplo, se tendría que poner restricciones a la producción o a la venta. Las otras medidas lo que han logrado es hacer más lento el desplazamiento vehicular, y con ello aumentar la quema de hidrocarburos contaminantes.

Además, si se busca alentar el uso de vehículos híbridos o eléctricos –que sí resultan en bien de la ecología–, si se les conceden algunas exenciones al pago de impuestos, ¿por qué se ejecutan acciones como la de los estacionamientos o los carriles confinados?

Algo sucede en estas políticas instrumentadas por el gobierno de la ciudad, que contienen un manojo de contradicciones, mismas que desorientan, confunden y causan rechazo entre la gente. Habrá que cuidar el asunto.

De pasadita

En el PRD, de donde salieron las modificaciones a la Constitución Política de la Ciudad de México en el tema electoral, se piensa hacer algún foro en defensa del texto fundacional. Lo que nadie explica es ¿quién va a defender a la Constitución del PRD? Vaya problema.