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La clase política ganó en desprestigio y desconfianza

¿Alianzas? Posibles, si a los líderes no los domina el protagonismo

El funcionario del gobierno de la ciudad mira hacia 2018 y da por hecho que él será quien encabece la estrategia de campaña de Miguel Ángel Mancera como candidato a la Presidencia de la República. Descarta aspirar o ser jefe de Gobierno sustituto y dice tener muchas posibilidades de ser diputado federal o senador

 
Periódico La Jornada
Lunes 21 de agosto de 2017, p. 34

La sentencia pretende no dejar dudas: En política se compra y se vende casi todo, el problema es qué queremos comprar y qué estamos dispuestos a pagar. Ya nadie habla de decencia. Se trata de Héctor Serrano Cortés, quien esta vez no hace referencia a la movilidad en la ciudad, sino que borda sobre su pasión y advierte que hoy la clase política mexicana lo único que ha ganado es desprestigio y desconfianza de la gente.

Sobre la mesa hay café recién hecho, huevos a la mexicana –como los recetó Clara, la dietista–, pan y tres temas: 2018, lealtad y dinero. H, como han decidido llamarle en el ámbito de su labor, no rehúye ningún asunto sobre la materia.

Se le recuerda, por ejemplo, la declaración en la que aseguraba que dejaría el gobierno de la ciudad, es decir, la Secretaría de Movilidad, en los últimos días de este mes y aclara: “Mi fecha límite es el 18 de septiembre, es decir, un día después de que mi jefe presente el Informe de gobierno que corresponde al ejercicio de este año.

“El proyecto sigue siendo el mismo: estoy plenamente convencido de que Miguel Ángel Mancera será competitivo y será candidato a la Presidencia de la República con altas posibilidades de ganarla. Esa es la principal motivación para dejar el cargo.

“Hablé ya con el jefe de Gobierno y le pedí que me permitiera cerrar este ciclo de mi vida laboral el 30 de agosto; sin embargo, me ha pedido que espere a que concluya con su Informe.

La decisión que tomé de irme antes de su Informe es porque probablemente mi jefe de Gobierno realizará algunos movimientos, como es natural, en la recta final, a poco más de un año de que concluya su encargo, y no me gustaría que se interpretara ante la opinión pública que mi salida obedece a ese ajuste y no a una decisión personal. Digamos que yo me cuezo aparte. Entonces, lo digo con precisión: vamos en paquetes aparte.

Serrano, que en el último piso de la secretaría que encabeza tiene tres despachos en los que atiende, muchas veces al mismo tiempo, los asuntos de gobierno que le encarga desde el Zócalo Miguel Ángel Mancera, sabe que a esta dependencia, entre bromas y veras, se le quitó el nombre de Semovi (Secretaría de Movilidad) y en un juego de palabras no desprovisto de lecturas malintencionadas se le sobrepuso el de Segobi (Secretaría de Gobierno).

Directo mira al futuro inmediato y advierte que da por hecho que él será quien encabece la estrategia de campaña de Miguel Ángel Mancera como candidato a la Presidencia de la República. Yo siempre lo he dicho: en la política no hay nada escrito y cualquier cosa puede suceder, y como en la vida, todo lo que anhelas hay que construirlo. Esa es una de las enseñanzas que precisamente la política me ha dado, pero también, lo digo en forma exacta, ya no estoy en la edad ni con la inmadurez para que el protagonismo mueva mi conducta. En lo que sea y como sea cumpliré con mi compromiso moral de acompañar a Miguel Ángel Mancera, porque así me comprometí, porque así lo siento, porque así lo creo.

Sin dejar de mirar al 2018, también habla de su lealtad, del PRD: “Tengo muchas probabilidades de ser diputado federal o senador por mi partido. Siempre me he sentido orgulloso militante del PRD, que no está en su mejor momento, pero de ninguna manera abandonaré este espacio en el perredismo, que me ha permitido crecer y aportar a mi cuidad. A mí no se me da la ingratitud –lo dice levantando la barbilla, en tono serio–; siempre he apostado a un solo proyecto”.

Entonces advierte que hay personajes de la política a los que ha podido darles consejos, “aunque a veces con poco éxito, pero les he dicho: cuando se coloca un pie de un lado y el otro del otro, se corre el riesgo de que cuando se abran los puntos te pase lo que yo he denominado el split (fractura) político, y el golpe sea contundente, donde más duele, es decir, en los güevos, ¡perdón, eh!, pero es literal.

“Fui oficial mayor en la Cámara de Diputados, fui oficial mayor en la Asamblea Legislativa; me gusta la vida parlamentaria y hoy quiero experimentarla, ya no como cantinero. Respecto de no ser candidato a jefe de Gobierno, muchos amigos, generosamente, me han colocado en la línea de competencia para ser candidato o para sustituir al jefe de Gobierno, pero lo más importante que tengo, o lo más valioso que tengo es mi palabra. Si ya dije que no, como dicen en mi tierra, que es Iztapalapa, lo que se dice con la boca se sostiene con todo lo demás.

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Estoy plenamente convencido de que Miguel Ángel Mancera será competitivo y será candidato a la Presidencia de la República, con altas posibilidades de ganarla, aseguró en entrevista el secretaro de Movilidad, Héctor Serrano CortésFoto La Jornada

No voy a traicionar a nadie, nunca lo he hecho en mi vida, jamás; siempre he cerrado mis ciclos. No existe una persona, un político o un amigo real que deba sentirse traicionado por mí. Soy un hombre frontal, soy un hombre directo. No voy a ser candidato a jefe de Gobierno, no pretendo ser jefe de Gobierno sustituto. Refrendo lo que he venido diciendo desde hace tres años.

La izquierda no es la misma

Más allá de convertirse en miembro de alguna de las Cámaras –Diputados o Senadores– Héctor Serrano no tiene alguna otra cosa en su radar, ni siquiera ser presidente del PRD. Creo qué hay otros militantes con mayores posibilidades. Tengo una militancia de 15 años en el PRD, antes la tuve en el PRI, y en algún momento de mi vida, sin duda, fue un anhelo, pero hoy no seré obstáculo para fortalecer a mi partido, simple y llanamente quiero seguir siendo un facilitador. Acto seguido, responde sobre las ideas aliancistas que hoy ocupan al PRD.

“Claro que son posibles si a los líderes no los domina el egoísmo y el protagonismo. Mira, la izquierda de los años 70, con la que yo crecí, no es la misma izquierda que hoy se vive. Quienes siguen en esa visión es porque creen que les sigue redituando ese discurso, que ya nadie cree y que la patria no necesita.

La alianza es el compromiso de todos en favor de un bien común, del bienestar social, del buen vivir en favor de los pobres, de la esperanza de México, es decir, todos aparentemente queremos lo mismo, entonces, por qué no dejar a un lado lo personal. Es el momento de la reconciliación de la clase política mexicana en favor de nuestra gente; es la hora de demostrar que somos más que un cúmulo de aspiraciones personales y proyectos individuales que sólo acreditan mezquindad y egoísmo.

–¿El PRD será factor para impedir que Morena llegue a la Presidencia de la República?

–Ha quedado más que claro que el PRD nunca ha estado en contra de la posibilidad de una alianza entre izquierdas. Es más, el PRD siempre ha acompañado con lealtad a los actores que, circunstancial, y como todo en la vida, transitoriamente, ocupan una posición de reconocimiento. Creo que ya ha quedado claro que mi partido no es responsable de ninguna forma de que la izquierda no vaya unida. El objetivo no es Morena; pensar así resulta absurdo y altamente banal”.

–El crimen organizado ¿está metido o será factor en la próxima elección?

–Estoy convencido de que debemos ser muy cuidadosos para que eso no suceda. Siempre es importante ser cautos y precavidos con quien nos juntamos. Sería devastador que así sucediera; sería un retroceso con saldo muy negativo para toda la clase política.

–¿Qué tanto se compra y qué tanto se vende en la política hoy día?

–En la política se vende mucho y casi todo, el problema es qué quieres comprar y qué estas dispuesto a pagar, y eso lo marcan tus principios. Ya nadie habla de decencia, ya nadie la menciona. Todos debemos tener límites. Preocúpense del político que esté dispuesto a hacer todo para obtener todo.

–¿Qué prefieres, convencer o controlar?

–Es más difícil convencer, pero es el camino más favorable. Controlas al convencer, y si alguien dice lo contrario, estará mintiendo. Ser congruente, derecho y cumplidor es la mejor forma de convencer.

En el último piso de la Secretaría de Movilidad aún nada se mueve, pero todo está preparado para la mudanza.