Enojo, deleite y hasta pánico vivieron los 10 mil asistentes al cierre de la gira Confidencias

Alejandro Fernández comenzó con una hora de retraso, lo que provocó molestia

Con impecable apariencia cantó los éxitos esperados y cautivó al público

Al final, mientras interpretaba un popurrí, se comenzó a escuchar entre la audiencia: ¡Está temblando!, y se evacuó el recinto