Agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) violaron las garantías fundamentales de 17 adolescentes centroamericanos, quienes fueron víctimas de revisiones intrusivas, ilegales y arbitrarias al ingresar en la estación de esa instancia en Puebla.

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acreditó los actos irregulares cometidos por los agentes del INM, por lo que emitió una recomendación dirigida al titular del instituto, Ardelio Vargas Fosado.

En su investigación, el organismo presidido por Luis Raúl González Pérez comprobó además que los adolescentes no fueron puestos de inmediato a disposición del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia o DIF estatal, y contrario a ello se les mantuvo detenidos en las instalaciones migratorias.

Tras analizar las evidencias y testimonios del caso, ocurrido en noviembre de 2016, la CNDH comprobó violaciones a los derechos a la seguridad jurídica, la privacidad y el interés superior de la niñez de esos adolescentes, imputables al personal del INM.

La CNDH subraya que las niñas, niños y adolescentes en contexto de migración se ubican en situación de extrema vulnerabilidad, siendo a menudo víctimas de abusos por parte de agentes estatales y el crimen organizado, por lo cual requieren protección especial.

Por ello, recomendó a Vargas Fosado realizar las acciones necesarias a fin de localizar a los adolescentes agraviados e inscribirlos en el Registro Nacional de Víctimas, para que se les otorgue asistencia y la reparación integral del daño, entre otros exhortos.