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Ver día anteriorMartes 12 de diciembre de 2017Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Negocios y Empresas

Baja el costo de la energía

L

a manipulación que lleva a cabo el gobierno en el precio de los energéticos mediante el alza o baja artificial de los impuestos no permite ver el costo real de los derivados petroleros y de la electricidad. En teoría se liberó el precio del gas y de las gasolinas, pero en la práctica se controla mediante el manejo discrecional de los impuestos.

A pesar de lo anterior, la tendencia global en el costo de la energía es a la baja. Esto se debe principalmente a los siguientes factores: la conformación de bloques de países que buscan la autosuficiencia energética (en nuestro caso, con Estados Unidos y Canadá), el uso más eficiente de la energía en fábricas y en el sector automotriz, la creciente conciencia ecológica y, por último, el avance de energías alternativas, como la eólica y la solar.

El mercado que muestra mejor la tendencia a la baja es el eléctrico y, en especial, el de Texas, que es abierto. En este caso el precio promedio al mayoreo es menor a 25 dólares por megavatio-hora, mientras hace 10 años era de 55 dólares (Electric Reliability Council of Texas), es decir, el precio es ahora menor 50 por ciento del de hace una década y la tendencia de mediano plazo es a un ajuste mayor.

En consecuencia, muchas empresas del sector con plantas obsoletas de hidrocarburos o de energía atómica tienden a cerrar instalaciones en los países donde hay apertura comercial. En cambio, en aquellos que protegen a su industria de la competencia, como fue hasta hace poco el caso de México, Venezuela, Rusia o China, se mantienen abiertas las plantas obsoletas.

En México esta situación comienza a cambiar para bien de la economía y del medio ambiente. Hay casos de generación de energía limpia, como Elan Energy, de Isaac Romano, que generan energía bajo la modalidad de abasto aislado, lo cual significa que ocupa la energía desperdiciada por el sector empresarial para volver los procesos más eficientes.

El mundo cambia con gran rapidez en el uso de energía a costos cada vez menores, y esa será la tendencia en México si es que el gobierno deja de manipular los precios de los hidrocarburos.