El aspirante del PRI al Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, realizó ayer un recorrido por la zona de Tacubaya, delegación Miguel Hidalgo, donde coincidió con los vecinos y locatarios sobre las condiciones de inseguridad, movilidad, falta de agua y contaminación que prevalecen en esa histórica colonia del poniente de la capital.

El aspirante consideró que es urgente poner orden donde prevalece el caos, de manera particular en los entornos del mercado público y de los paraderos del transporte público concesionado, que parte continuamente de este lugar con rumbo a otras demarcaciones territoriales, como Álvaro Obregón y Cuajimalpa.

Destacó que las acciones realizadas por el Gobierno de la Ciudad de México o por el perredista Víctor Hugo Romo, ex titular en Miguel Hidalgo, o su sucesora, la panista Xóchitl Gálvez, han sido insuficientes para darle condiciones dignas a las calles de esta zona.

Hizo énfasis en que si bien esa es una tarea conjunta de las autoridades, la competencia delegacional no ha funcionado, pues desde 2014 se pretende mejorar Tacubaya, pero todo sigue igual. Romo propuso (desde aquel año) una solución y habló de 400 millones de pesos, y eso nunca lo vimos; Xóchitl propuso 14 millones para un estudio, y tampoco.

Ante tal situación, planteó que por la vía de la transparencia y rendición de cuentas se solicite la información respectiva para saber dónde o en qué terminaron esos recursos presupuestales.

Una de las quejas recurrentes durante la gira fue la de la inseguridad, los robos constantes a transeúntes y a bordo de las unidades de transporte; varias personas comentaron que han optado por llevar doble cartera o un celular barato.