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En México está prohibido investigar la verdad sobre la violencia social

N

os solidarizamos con las doctoras Rocío Córdova Plaza y Mayra Ledesma Arronte, de la Universidad Veracruzana, responsables del Proyecto UV como constructora de paz: alternativas a las violencias en Veracruz, quienes el 22 de febrero presentaron los resultados preliminares de dicha investigación, por lo que la Fiscalía General del Estado, citó a la primera a declarar. ¿Cuál fue su falta? Investigar el proceso constituyente y las formas de violencia que aquejan a su universidad y al estado. Como muchos otros investigadores, hemos conocido el proyecto y la encuesta aplicada, en un intercambio realizado con nuestro proyecto PAPIME de la UNAM (FFyL), sobre Cultura de Paz y No-violencia. Atestiguamos acerca del rigor científico y honestidad de ese estudio. Ciertamente el estado del poder en el país atraviesa una crisis sin precedente que se expresa en el tamaño de su fragilidad e intolerancia, acorde a la paz armada que propagan, lo que justifica el uso inusitado y expedito del aparato de justicia ante la divulgación de resultados parciales de una investigación académica en curso, sobre la violencia en la universidad y en Veracruz, en pleno clima electoral. Exigimos a las autoridades universitarias, sobre todo a las de Veracruz –que ahora han desconocido al proyecto pese a haberlo previamente aprobado–, que frenen esta nueva forma de ataque directo a la autonomía universitaria.

Pietro Ameglio y Myriam Fracchia (SERPAJ-México)

No es aceptable la apatía ante el problema que enfrenta la UNAM

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no requiere de instancias externas, como la Procuraduría General de Justicia de Ciudad de México o la Secretaría de Seguridad Pública, para enfrentar el problema de narcomenudeo en Ciudad Universitaria. Los operativos policiales no resolverían el problema, por el contrario, lo agravarían.

La UNAM cuenta con una fortaleza institucional, y en especial la de sus estudiantes, personal académico, investigadores y administrativos para resolver el problema de la venta de estupefacientes. Por ejemplo, se sabe cuáles son los puntos rojos donde existe mayor afluencia de narcomenudistas mismos que son combatibles. Hay también consciencia de que el sistema de vigilancia necesita modernizarse, pues el actual ya no cumple con las necesidades actuales de seguridad.

Asimismo, urge establecer mecanismos de denuncia anónima que permitan localizar a los dealers de manera oportuna, y reportar otros hechos delictivos en el campus universitario.

No es aceptable la apatía ante el problema que enfrenta la UNAM. Es urgente analizar a fondo el problema, y con la participación de la comunidad universitaria, aportar ideas y propuestas creativas y factibles para proteger la seguridad de nuestra alma mater.

Yolanda de Garay

La constitución moral de AMLO

La constitución moral de Andrés Manuel López Obrador tiene sus antecedentes más remotos en la República de Platón, en la Utopía de Tomás Moro, en la Ciudad de Dios de Tomasso de Campanela, en La Nueva Atlántida de Francis Bacon, que tiene su persistencia en el socialismo utópico y en el socialismo científico. En el orden estrictamente nacional se puede hacer referencia también, como antecedente más cercano en el tiempo, La Cartilla Moral de Alfonso Reyes. De todos estos antecedentes hay un común denominador que es el concepto de la felicidad común, el reparto equitativo de la riqueza, una justicia equitativa y sin obstáculos y sobre todo una solidaridad en torno a una valorativa del más alto nivel espiritual.

La constitución moral propuesta por Andrés Manuel no es una receta de cocina, ni un mamotreto jurídico más, sino una práctica de conciliación y buena voluntad que conlleva utilizar la tecnología, el conocimiento y los valores espirituales y morales en pos de una sociedad más justa y equitativa, de la que tan necesitada está la nación mexicana. Por demás está decir que esta nueva normatividad apela a la conciencia y a lo mejor del ser humano y no a las sanciones ni a la rigurosidad del procedimentalismo legal y coercitivo.

Carlos César Cárdenas Márquez

Precisiones a notas sobre pueblos indígenas

Le escribo en mi función de vicepresidenta del Mecanismo de Expertos de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.

Solicito su valiosa intervención para hacer las siguientes aclaraciones sobre las notas Constitución de CDMX despoja a pueblos ancestrales, reclaman y Pueblos originarios exigen la reposición del proceso de la Constitución de CDMX publicadas el 28 de febrero y el primero de marzo en su distinguido medio:

La misión del Mecanismo de Expertos de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas se ha centrado en las disposiciones con respecto a los pueblos indígenas consagradas en la Constitución de Ciudad de México y tiene como objetivo proporcionar cooperación técnica a las autoridades de la ciudad en el desarrollo de las leyes y políticas que se desprendan de estas disposiciones. Con este objetivo en mente, hemos incluido en nuestra agenda de trabajo reuniones con diferentes actores pertinentes, entre ellas la asamblea con comunidades indígenas y de pueblos originarios, celebrada el 27 de febrero en el Museo de las Culturas del Mundo.

El texto de su publicación alude que yo dije: el hambre que tienen los pueblos para expresar sus reclamos y tomé nota de irregularidades, lo cual no sucedió. Durante mi intervención en esta asamblea, pronuncié las siguientes palabras: hemos escuchado a representantes de gobiernos y a algunos líderes indígenas, y entendemos que el proceso de consulta del proceso constituyente presentó una serie de retos y dificultades que ojalá la idea es que no pasen en el proceso futuro de las leyes secundarias.

En mi participación enfaticé que se debe aclarar derechos que están en la Constitución Federal y en instrumentos internacionales que no pueden contradecirse con la Constitución o leyes subnacionales. Es necesario conocer las soluciones jurídicas que son normativas que sí encuentran un respaldo. Por ejemplo, el derecho a la tierra está muy claro y objetivo en la Declaración de las Naciones Unidas (sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas) y en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Érika Yamada

Invitación

Obra de teatro

Tadeco, el taller de la comunidad, invita en su sede El Albergue del Arte al inicio de temporada de Artemisa Teatro, con la obra: Las 80 mejores amigas, de Juan Carlos Cuéllar. Thriller sicológico en comedia donde dos actrices narran su propia tragedia a partir de un plano vivencial en un juego de 60 minutos una cabina de radio, conducidas por una singular locutora. Sábados de marzo, a las 19:30 horas, en el Foro El Albergue del Arte, en Alberto Zamora 32, colonia Villa Coyoacán. Reservaciones: teléfono 55 54 62 28. Entrada libre.