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El Kremlin desmiente que busque reanudar una carrera armamentista

EU, Francia y Alemania se dicen inquietos por las nuevas armas que presentó Rusia

Revela The Washington Post que la Casa Blanca venderá misiles al gobierno de Ucrania

 
Periódico La Jornada
Sábado 3 de marzo de 2018, p. 21

Washington.

Los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y de Francia, Emmanuel Macron, así como la canciller de Alemania, Angela Merkel, expresaron en conversaciones telefónicas la noche del jueves pasado sus inquietudes sobre los planes de desarrollo armamentístico que reveló el mandatario de Rusia, Vladimir Putin, reportaron ayer los gobiernos estadunidense y alemán.

Los tres gobernantes compartieron sus graves preocupaciones ante las más recientes afirmaciones de Putin sobre el desarrollo de armamento nuclear, las cuales menoscaban la discusión productiva entre Rusia y Occidente sobre varios asuntos, indica un comunicado de la Casa Blanca.

Putin, en su más reciente informe anual ante la Asamblea Federal –las dos cámaras que componen el Parlamento de Rusia–, reveló el jueves anterior el desarrollo de armas de última generación, entre ellas submarinos intercontinentales no tripulados y misiles crucero a propulsión nuclear, lo cual hizo temer una nueva escalada similar a la del fin de la guerra fría.

Heather Nauert, vocera del Departamento de Estado, acusó a Moscú de romper abiertamente los tratados de la era de la guerra fría por desarrollar una nueva generación de armas hipersónicas invencibles, submarinos no tripulados y nuevos proyectiles con capacidad atómica.

Argumentó: Rusia ha desarrollado sistemas de armamento en los pasados 10 años en violación directa de sus obligaciones, las cuales se desprenden de los tratados sobre control de armas, en especial el firmado en 1987 por Washington y Moscú.

En ese contexto, el diario The Washington Post reveló que Estados Unidos venderá a Ucrania misiles antitanques y lanzamisiles valuados en 47 millones de dólares para los enfrentamientos que libran contra grupos pro rusos, conflicto que se inició hace cuatro años por la anexión de la península ucrania de Crimea a la Federación Rusa.

En Berlín, Steffen Seibert, vocero de la canciller alemana, dijo ayer que Merkel y Trump se mostraron intranquilos por las nuevas armas presentadas por Putin y sus consecuencias negativas para los esfuerzos internacionales de control de armamento.

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) señaló en un comunicado que las amenazas de Putin contra los aliados son inaceptables y no ayudan a reducir las tensiones regionales. “No queremos una nueva guerra fría ni una nueva carrera armamentista”, subrayó.

En tanto, Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, negó ayer en Moscú que su gobierno quiera reanudar una carrera armamentista. Se trata de una reacción de Rusia al establecimiento del sistema antimisiles estadunidense, explicó.

Desmentimos categóricamente todas las acusaciones de que Rusia viola las disposiciones y los artículos del derecho internacional sobre el desarme y el control de armas. Rusia estuvo, está y estará limitada por sus obligaciones internacionales, enfatizó.

Putin aseguró durante un foro en Kaliningrado que si pudiera regresar en el tiempo su misión sería impedir la ruptura de la Unión Soviética de 1991, reportó la prensa local.