Canonsburg. Los republicanos se mostraron preocupados ayer, luego de que los demócratas se atribuyeron la victoria en una elección legislativa extraordinaria en Pensilvania, vista como un referendo sobre la gestión del presidente estadunidense, Donald Trump.

Si bien los resultados eran demasiado ajustados como para proclamar un vencedor, es un mal augurio para los republicanos, porque el demócrata Conor Lamb aventaja al candidato Rick Saccone en la disputa por un escaño en la Cámara de Representantes, a unos meses de las elecciones legislativas.

En las elecciones de 2016 Trump se impuso en este distrito de Pensilvania por casi 20 puntos.

Los primeros resultados oficiales podrían certificarse hasta el 26 de marzo, según funcionarios estatales, pero el recuento final podría tardar varias semanas.

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, calificó las elecciones de llamada de atención, en una reunión con miembros del partido, y los llamó a recaudar más fondos para las campañas.

Ryan apremió a los contendientes a destacar los recortes de impuestos aprobados por el Congreso dominado por los republicanos y convertidos en ley por Trump.

Lamb supera al republicano Saccone por 627 votos, meno de medio punto porcentual, de acuerdo con recuentos no oficiales del estado.

La elección, para remplazar a un legislador republicano que renunció por un escándalo, es la demostración de fuerza más reciente de los demócratas, que ganaron la gubernatura de Virginia y un escaño en el Senado en el estado conservador de Alabama, en lo que consideran grandes victorias.