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Desde 2010, vecinos de El Botho se encargan de su comida y transporte

Pueblo de Ixmiquilpan cuenta con médico sólo una vez al mes
Corresponsal
Periódico La Jornada
Domingo 13 de mayo de 2018, p. 25

Ixmiquilpan, Hgo.

Para recibir atención médica, los poco más de 300 habitantes de la comunidad El Botho, en este municipio, deben cooperar para darle de comer al médico que una vez al mes les envía la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), a fin de dar consultas en la pequeña clínica construida por los mismos pobladores, en la cual no hay medicamentos ni instrumental.

Según el catálogo de comunidades de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) estatal, El Botho está clasificado como poblado de alta marginación.

La clínica, un pequeño inmueble de cinco por tres metros, permanece cerrada y sólo abre sus puertas una vez al mes cuando el médico llega. Los lugareños formaron un comité de salud de 10 vecinos designados en el régimen de usos y costumbres. Cada uno se turna mes con mes para llevar al médico y aportar los alimentos que le dan cuando termina de atender a los pacientes, que siempre son muchos, pues acuden de los pueblos vecinos San Miguel Jiguí, El Boxo y Santuario Mapethé, entre otros, pertenecientes a los municipios de Ixmiquilpan y Cardonal.

En entrevista, el delegado de El Botho, Julián Cecilio Huizache, explicó que desde hace ocho años nos cooperamos cada mes para darle de comer al doctor, a la enfermera o a quien manden a la casa de salud para atendernos.

Detalló que el comité de salud tiene la encomienda de reunir la cooperación de casa en casa, económica o en especie, para comprar y preparar los alimentos y para el transporte de regreso del médico a la cabecera municipal de Ixmiquilpan.

Señaló que llevan años solicitando a la SSH el envío de un médico para que se quede en la comunidad y atienda todos los días, pero no nos hacen caso. También hemos enviado oficios para solicitar medicinas y sólo nos responden que no hay, acusó Huizache. En casos de emergencia, cuando alguna persona sufre algún accidente o enfermedad grave pedimos prestado un coche y lo llevamos a donde Dios quiera, expresó.

A la fecha, el señor Pascual Charrez, alcalde de Ixmiquilpan con licencia, es el único que nos ha dado ayuda con transporte de enfermos y algunas medicinas. Además de la falta de galeno y fármacos, la clínica está en pésimas condiciones, tiene los vidrios rotos y la fachada deteriorada. Queremos decir que no estamos conformes con esta situación, añadió el delgado del pueblo.