Sociedad y Justicia
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El premio Nacional de Ciencias 2012 insta a frenar fuga de cerebros

Barrera y Pérez: requiere el país centros de investigación de alto nivel
 
Periódico La Jornada
Domingo 16 de diciembre de 2012, p. 33

El doctor Rubén Gerardo Barrera y Pérez se ha dedicado de lleno al estudio de la luz, fenómeno que le sigue intrigando, y por el cual acaba de ser galardonado con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2012, en el campo de ciencias físico-matemáticas y naturales.

Barrera, profesor e investigador del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), recibió el premio de manos del entonces presidente Felipe Calderón el pasado 27 de noviembre, en reconocimiento a su trabajo en el campo de la física de la materia condensada y la interacción entre la luz y las superficies y materiales complejos.

En entrevista con La Jornada, el científico –también ganador del Premio Universidad Nacional en 2003– reflexiona sobre su trabajo y subraya que uno de los primeros pasos para detener la fuga de cerebros es crear centros de investigación de alto nivel en el país, para que los jóvenes posgraduados tengan expectativas interesantes de trabajo en México.

La labor por la cual fue reconocido con el Premio Nacional de Ciencias y Artes, explicó Barrera, tiene que ver con el estudio de las propiedades ópticas de la materia, es decir, de qué forma algunos materiales pueden modificar las propiedades de la luz.

En plena era del silicio –uno de los componentes indispensables en las computadoras, los teléfonos celulares y otras herramientas tecnológicas que hoy se usan de forma cotidiana–, la labor realizada por el científico mexicano, en colaboración con especialistas como Luis Mochán, puede ayudar a identificar si los cristales de dicho material están creciendo de forma adecuada.

Otras aplicaciones de dicho trabajo, indicó, son poder estudiar con luz algunas superficies semiconductoras más pequeñas que una micra (equivalente a la millonésima parte de un metro), lo cual puede ser útil, por ejemplo, para hacer detecciones de cáncer de mama.

Soy producto de la UNAM, porque todo lo que yo he hecho ha sido aquí, donde llegué como estudiante en 1960. Mi relación con la UNAM y el apoyo que me ha brindado es enorme, subrayó Barrera, quien tiene estudios de posgrado en las universidades de Illinois (Estados Unidos), Aachen y Frankfurt (Alemania).

–¿Por qué le apasionó el estudio de la luz?

–Si uno lee el Génesis, lo primero que se hizo fue la luz. Siempre me han interesado la luz y los campos electromagnéticos. Hay historias fascinantes y me sigue intrigando saber qué son estas cosas. Ha sido una pasión muy fuerte tratar de entender la luz, la mecánica cuántica y los fotones.

–¿Qué opinión tiene del aumento de 15 por ciento en el presupuesto para ciencia y tecnología, anunciado por Enrique Peña Nieto?

–Que se aumente el presupuesto siempre es bueno, ahora hay que ver cómo se va a usar. En 10 o 12 años no se han creado nuevos centros de investigación, y tenemos que formarlos porque muchos jóvenes se van a estudiar un posdoctorado al extranjero y ya no vuelven porque no hay lugar para ellos. Los muchachos necesitan un ambiente estimulante donde se haga física de primer nivel, y esos espacios no existen en México.

Barrera consideró, por otro lado, que hace falta generar un vínculo más fuerte entre los científicos y los empresarios e ingenieros, quienes finalmente son los creadores de nuevos desarrollos tecnológicos. Se necesita una política a más alto nivel, más ambiciosa, a largo plazo y sin vaivenes sexenales, indicó.