Sociedad y Justicia
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Segunda zona prioritaria de explotación de hidrocarburos

Riesgoso, intensificar fracking en la región Tampico-Misantla

Estudio alerta sobre daños de usar químicos en territorios indígenas

 
Periódico La Jornada
Lunes 9 de mayo de 2016, p. 33

La región petrolera Tampico-Misantla es la segunda del país en prioridad para explotar hidrocarburos en yacimientos de lutitas y en la que se busca realizar fracturación hidráulica, para extraer gas. Ello pone en riesgo territorios indígenas y campesinos.

En dicha región se concentra 57.8 por ciento de este tipo de yacimientos nacionales, por lo que el Estado planea intensificar la actividad exploratoria en los próximos años, para determinar las reservas que realmente existan, señala el estudio La fracturación hidráulica en la sierra norte de Puebla: una amenaza real para las comunidades, elaborado por Fundar y la Alianza Mexicana contra el Fracking.

Hay 13 municipios poblanos que se encuentran en la cuenca Tampico-Misantla –entre ellos Acaneo, Ayotoxco, Pantepec, Venustiano Carranza y Xicotepec–, donde el petróleo sería el principal hidrocarburo, señala el reporte.

El documento agrega que hasta 2013 había alrededor de 233 pozos en los municipios Francisco Z. Mena, Venustiano Carranza y Pantepec –con 121, 98 y 14, respectivamente–, en los cuales se había realizado fracking.

Esta actividad, indica, se encuentra rodeada de opacidad y no hay mecanismos de participación efectivos, ya que la información sólo pudo obtenerse mediante solicitudes realizadas por organizaciones de la sociedad civil, pues la población no fue informada directamente por el gobierno ni fue incluida en la toma de decisiones sobre estos proyectos.

El análisis explica que la Secretaría de Energía, en el documento Resultado de la ronda cero, indicó que la Sierra Norte se sitúa en dos de las áreas entregadas a Pemex para exploración de hidrocarburos no convencionales, es decir, los que requieren ser fracturados hidráulicamente.

La entrega de esas áreas y la decisión sobre utilizar esta técnica no han sido informadas de manera previa a la población de la zona, afirma.

La fracturación hidráulica o fracking, detalla, es una técnica que consiste en perforar para hacer pozos en los que se introducen alrededor de 750 productos químicos altamente tóxicos mezclados con agua, con el fin de extraer los hidrocarburos. Se trata de químicos, apunta, que pueden causar enfermedades como cáncer y daños en los sistemas endócrino y nervioso.

Además, refiere, las fugas del líquido hacia acuíferos son inevitables, por lo que el ambiente y la población quedarán expuestos.

Al menos cinco cuencas hidrográficas de la Sierra se verán afectadas, con impactos también en otras regiones. Debido a la extensión territorial que conlleva esta actividad, es incompatible con la agricultura, la ganadería y los modos de vida y supervivencia de los pueblos totonaco, nahua, otomí y tepehua, así como las comunidades campesinas de la Sierra.

El documento indica que también en el plan quinquenal de licitaciones para la exploración y extracción de hidrocarburos, publicado en junio de 2015 y actualizado en octubre pasado, se prevé la entrega de contratos para exploración de gas y petróleo no convencional en la Sierra Norte. De esta manera, 13 municipios tienen territorio comprometido como parte de las rondas 2 y 3 de ese plan.