Madrid. El actor español Arturo Fernández, conocido como el galán eterno por sus casi siete décadas de carrera en el cine, teatro y televisión, falleció ayer a los 90 años, informó un sindicato del gremio.

Adiós a uno de los grandes actores de nuestro país y al gran galán de la interpretación. Descansa en paz, escribió en Twitter el sindicato español de actores y actrices.

Fernández, nacido en Gijón (Asturias) en 1929, se mantuvo en activo hasta el final: en abril debió retirarse de la comedia teatral Alta seducción, que protagonizaba, aquejado de problemas de salud, de los que no se recuperó.

Durante su dilatada carrera, que se inició a principios de la década de los 50, se construyó una figura de galán y conquistador con recurrentes papeles en la pantalla grande y en el teatro en los años 60 y 70.

Su popularidad creció en 1983 con Truhanes, película en la que hacía de estafador sofisticado y culto, que una década más tarde fue llevada con éxito a la televisión.

Una nueva generación conoció su rostro en la pantalla chica, donde sacó su lado más humorístico y popularizó el término chatina, apelativo cariñoso para las mujeres que se hizo de uso común entre los españoles.

En esta época protagonizó La casa de los líos, entre 1996 y 2000, como el simpático y elegante vividor de edad madura en la seguida serie de televisión.

La muerte de Fernández provocó numerosas reacciones en redes sociales. El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, alabó su vida dedicada al teatro, el cine y la televisión.