Víctor Alberto Barreras Castro, cuyo nombramiento como cónsul en Las Vegas, Nevada, quedó suspendido luego de hacerse pública una acusación de 2011 en su contra por el delito de estupro, se declaró inocente y aseguró no haber sostenido relaciones íntimas con la niña.

En una carta pública, declaró que la acusación se basó en acusaciones contradictorias y se desestimó por falta de pruebas. Incluso, aseguró, su ex alumna reconoció públicamente que nunca sostuvieron relaciones sexuales.

Vía telefónica indicó que, incluso, los padres de la denunciante retiraron la demanda y le ofrecieron disculpas, pues la chamaca les había mentido. Explicó que debido a que se trata de un delito que se persigue de oficio, el proceso de investigación continuó un par de me-ses y es falso que pagara alguna cantidad para que se desistieran de la acusación.

Durante el proceso de investigación, colaboré con lo necesario para aclarar la situación, nunca estuve preso ni fui prófugo de la justicia y jamás dejé mi trabajo.