La medida unilateral de Estados Unidos de enviar a Guatemala a mexicanos solicitantes de asilo no tiene fundamento, advirtió el director de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Andrés Ramírez, quien ha sido también funcionario de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados en distintas regiones del mundo.

Expuso que la pretensión tampoco cumple con el razonamiento de un tercer país seguro (los mexicanos no cruzaron Guatemala para llegar a Estados Unidos).

Ellos (el gobierno del vecino país del norte) se basan en un acuerdo bilateral con Guatemala, el cual desconocemos, indicó el funcionario.

Después de conocerse información acerca de que el Departamento de Estado estadunidense pretende modificar su política de atención hacia los mexicanos peticionarios de protección, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que analiza el tema con el canciller Marcelo Ebrard Casaubon.

“Es lo que estamos analizando ahorita; lo estoy platicando con el canciller Ebrard, porque es un tema bilateral. Tomé nota por el tema que salió en The New York Times, entonces hace un rato que estuve con el titular de Relaciones Exteriores le platiqué y vamos a ver cómo vamos a abordar el tema”, dijo.

El director de la Comar destacó que la pretendida medida tampoco funcionaría, “porque no creo que los mexicanos se quisieran ir a Guatemala a esperar un procedimiento que ellos querían hacer en Estados Unidos.

Además, no veo dónde está el fundamento jurídico de la medida adoptada; no lo hay, comentó en entrevista.

México recibió en 2019 poco más de 70 mil solicitudes de refugio, que se suman al de unas 60 mil personas, principalmente centroamericanas, que fueron enviadas a México a esperar aquí respuesta a sus procesos.

–¿México sigue siendo entonces un cuello de botella?

–Claro. El número más o menos de quienes están esperando (respuesta de Estados Unidos) anda alrededor de 60 mil. Entonces, la política nuestra ha sido respetar ese procedimiento, no meternos.