Ť Cuestionan que tomen medidas populistas para evitar costos políticos electorales

Reclaman empresarios a los partidos responsabilidad ante la reforma fiscal

Ť Impuestos adicionales, daño al aparato productivo, inversiones y al bienestar social, alertan

Ť El Congreso tiene en su manos iniciativas responsables de la sociedad, asegura Coparmex

HUMBERTO ORTIZ MORENO

Dirigentes del sector empresarial cuestionaron ayer a los partidos políticos porque, en aras de evitar costos político-electorales, "resulta grave" que opten por medidas populistas y no asuman la responsabilidad que les corresponde frente a la reforma fiscal.

Alertaron sobre el severo daño para el aparato productivo, las inversiones y el bienestar social que significan las ideas de "parchar lo parchado" y elaborar una miscelánea recaudatoria que contempla impuestos adicionales.

"Después de meses de análisis y discusión sobre la propuesta de reforma fiscal, el Congreso de la Unión tiene en sus manos iniciativas responsables de la sociedad y del sector empresarial para recaudar más recursos con los que el gobierno podría impulsar el desarrollo social y económico, al tiempo de promover la inversión y la generación de empleos", argumentó de entrada el organismo patronal que encabeza Jorge Espina, en una declaración emitida anoche, a la cual se han sumado todos los organismos sectoriales.

De peligrosas para el país calificaron los dirigentes Raúl Picard, de la Canacintra; Javier Prieto, de la Concamin, y el propio Espina, de Coparmex, las propuestas partidistas de imponer más gravámenes especiales y eliminar tasa cero y exentos, y reiteraron su planteamiento de consenso dentro del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), para aplicar un IVA de 4 por ciento a la cadena alimenticia, junto con medidas que permitan compensar con creces el efecto sobre los grupos menos favorecidos; mecanismos eficientes para lograr que mayor número de mexicanos coadyuve al desarrollo; combate al contrabando con formas de fiscalización eficaces, y medidas de promoción a la inversión y empleo.

Rechazaron estas iniciativas:

- Primero, la intención de aplicar un impuesto adicional especial al servicio telefónico, porque constituirá un obstáculo para el crecimiento de las telecomunicaciones, la inversión en infraestructura y la actualización tecnológica.

"La medida dañaría la economía familiar y limitaría el futuro acceso masivo al teléfono e Internet, frustrando el proyecto de un México con mejores niveles de seguridad, educación salud", enfatiza Espina.

- La implementación de impuestos especiales a refrescos y jugos, así como aumentos a los ya establecidos para licores y tabacos, es una experiencia que ha probado ofrecer "una pobre recaudación y un lamentable impacto en la inflación del costo de vida".

- Gravar las operaciones bursátiles conllevaría a un desastroso efecto en la captación de inversiones, amén de una complejidad administrativa que haría difícil su aplicación.

- Exentar del IVA a los alimentos distorsionaría los balances en la cadena productiva e impactaría en los precios finales.

- Y eliminar el crédito fiscal que reciben los trabajadores de bajos ingresos y crear nuevos impuestos para compensarlo, elevaría el costo-país, afectaría a las pequeñas y medianas empresas, promovería la economía informal e inhibiría la creación de plazas de trabajo.

Jorge Espina abogó por que al final de las discusiones prevalezcan la sensatez y el buen juicio.